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Bukavu (Agencia Fides)- Suscitó viva conmoción e indignación en Bukavu, capital de Kivu del sur en el este de la República Democrática del Congo, el asesinato de Didace Namujimbo, periodista de Radio Okapi, órgano de información sostenido por la Misión de las Naciones Unidas en Congo (MONUC) y por la Fundación Hirondelle (fundación con base en Suiza para apoyar a los medios de comunicación independientes que pasan por situaciones difíciles).
Namujimbo fue asesinado el 21 de noviembre por desconocidos mientras regresaba a casa tras una jornada de trabajo.
La Fundación Kataliko “Actions Pour l'Afrique” envió a Agencia Fides un comunicado en el que se resaltan las similitudes entre este homicidio y el asesinato de otras personas que lucharon por la paz en la verdad y en la justicia en Bukavu. “Este homicidio, tras el de Serge Maheshe, de Kabungulu, de Mons. Munzihirwa y de otros líderes de la sociedad civil se sitúa en el plan por hacer callar a las personas que tienen opinión propia e independiente o que conocen demasiado a los enemigos de la población, de la paz y de la verdad”, afirma el comunicado de la Fundación Kataliko, que toma el nombre de Mons. Emmanuel Kataliko, Arzobispo de Bukavu, fallecido en Roma en el 2000, y que luchó por la paz en Kivu. Mons. Kataliko tomó el lugar de Mons. Munzihirwa, quien fue asesinado el 29 de octubre de 1996 tras el estallido de la guerra que habría llevado a la caída de Mobutu.
Pascal Kabungulu Kibembi, defensor de los derechos humanos, fue asesinado el 31 de julio del 2005 en su casa, frente a la familia. Serge Maheshe, también periodista de Radio Okapi, fue asesinado el 13 de junio del 2007; los presuntos asesinos fueron condenados a un proceso fue criticado por los líderes de la sociedad civil a causa de la falta de transparencia.
La Organización No Gubernamental local “Congolese Action for Peace and Democracy”, CAPD, resalta, en un comunicado enviado a Agencia Fides, que “no obstante la presencia de los inquirentes de la Corte Penal Internacional, las violaciones de los derechos humanos continúan en el territorio de la RDC”.
Mientras tanto, en Kivu del norte, se ha verificado un grave incidente entre Cascos Azules de la MONUC y soldados del ejército regular, cuando en un puesto de bloqueo los militares detuvieron a dos blindados de la ONU. En el interior de uno de estos se encontraron una decena de hombres vestidos de civiles y otros en uniforme. Según los Cascos Azules se trataba de milicianos Mai-Mai, aliados del ejército. Pero los soldados creyeron que se tratase de rebeldes de Laurent Nkunda. El grupo de hombres fue en consecuencia golpeado salvajemente sin que los Cascos Azules pudiesen intervenir. La población local inició a imprecar y tirar piedras contra los militares de la ONU, que fueron auxiliados por sus compañeros de una base cercana. La población local sospecha que la MONUC actué en complicidad con los rebeldes. (L.M.) (Agencia Fides 24/11/2008; 41 líneas, 506 palabras)
