OCEANÍA/ISLAS SALOMÓN - Valorizar el carisma femenino en la sociedad y en la Iglesia de las Islas Salomón

Honiara (Agencia Fides) – Las mujeres de la comunidad católica de las Islas Salomón están adquiriendo mayor conciencia de su rol, de sus potencialidades y de su carisma, para poder dar un servicio cada vez más útil a la sociedad y a la Iglesia local: es lo que se dijo en un reciente seminario celebrado en la Arquidiócesis de Honiara que reunió a laicas y religiosas directamente comprometidas en la pastoral de la comunidad local. Las mujeres presentes, convocadas de todo el archipiélago, reafirmaron el apoyo recíproco, la voluntad de experimentar la comunión y compartir las propias historias y las propias dificultades, renovando al mismo tiempo el compromiso y la esperanza de ser valoradas y de poder poner sus propios talentos y carismas a disposición de la Iglesia local.
Sor Abel Lucero, de la Oficina para el Apostolado de la Familia de la Arquidiócesis, condujo el seminario, ayudando a las mujeres presentes a reconocer y descubrir sus propios dones y aumentar así la propias autoestima y capacidad de liderazgo. Las cerca de 30 mujeres participantes eran catequistas, maestras, animadores de grupos juveniles, mujeres comprometidas en el servicio de la caridad, todas ya insertadas en la Pastoral de la Iglesia.
Refiriéndose al texto de la Carta Apostólica “Mulieris Dignitatem”, de la que se celebra el XX Aniversario, la asamblea notó cómo existen todavía diversos puntos que deben hacerse concretos para una auténtica valorización del rol femenino en las Islas Salomón y en el Pacífico, tanto en la sociedad como en la Iglesia. Pero al mismo tiempo, se afirmó, ha crecido en los últimos años el aporte y el rol de las mujeres en los ámbitos de la instrucción, la asistencia social, la cultura, y la Iglesia está en la vanguardia en lo que se refiere a dar espacio y dejar surgir las potencialidades y los carismas de las mujeres.
Entre las propuestas que van en la línea de la “igualdad de oportunidades”: reforzar los programas de educación en las familias; alentar los movimientos eclesiales que trabajan a nivel pastoral con parejas, difundiendo una cultura de la igualdad de derechos; ofrecer bolsas de estudio reservadas a las muchachas; involucrar a mujeres en tareas de animación pastoral y cursos de teología; reservar a las mujeres por lo menos algunos lugares en los consejos pastorales a nivel parroquial y diocesano”. (PA) (Agencia Fides 26/6/2008; líneas 25 palabras 386)