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Roma (Agencia Fides) - "Tian Zhuu Jiang Fue Zhong Guo (Dios bendiga China)", así ha concluido el Card. Iván Dias, Prefecto de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos su homilía durante la Santa Misa celebrada el sábado 24 de mayo con ocasión de la Jornada de Oración por la Iglesia en China. La celebración se ha desarrollado en la Basílica de Santa Maria La Mayor, definida por el mismo Cardenal como “madre de todos los santuarios mariano”.
La solemne Concelebración Eucarística de Roma ha sido la respuesta a las indicaciones del Santo Padre Benedicto XVI lanzadas en la Carta a los católicos chinos publicada el 30 de junio de 2007. Además los católicos chinos celebran el 24 de mayo la Virgen “Maria Ayuda de los cristianos” venerada en el Santuario mariano de Sheshan, de la diócesis de Shanghai. Cerca de mil fieles, católicos y no católicos , chino, italianos y también de otros países, han observado un minuto de silencio para recordar las víctimas del terremoto en Si Chuan, mientras sonaba la campana de la Basílica de Santa Maria La Mayor durante la oración de los fieles. Los fieles chinos provenientes de Prato, Florencia, Nápoles, Milán, Treviso…. junto a aquellos de Roma y los fieles italianos, han participado en la Santa Misa concelebrada por unos ochenta sacerdotes chinos e italianos, con seminaristas del Colegio Urbano. La liturgia ha sido celebrada en chino y en italiano, con los cantos en chino.
El Card. Dias ha subrayado los frutos recogidos a un año de la Carta del Papa, sobre todo la unidad entre los católicos chinos, la cercanía y los gestos de amistad entre la Santa Sede y China como el Concierto “que constituyó un bello gesto de las autoridades chinas hacia el Santo Padre. Y el Santo Padre ha tenido un pensamiento de agradecimiento hacia la población china. Después del terremoto, el Santo Padre ha demostrado rápidamente su gran sensibilidad en la audiencia general después de la tragedia, animando a socorristas y supervivientes, y lanzando un llamamiento a todo el mundo para ayudar a la población afectada por el terremoto. Posteriormente el Santo Padre ha escrito de su propio puño la Oración a la Virgen de She Shan, y ha insistido para que hoy nosotros celebráramos esta Misa" ha dicho al Prefecto de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos. En la homilía también ha subrayado que "en el paraíso no habrá distinción entre católicas escondidos y católicos oficiales… el Papa aprecia la fe y la fidelidad de los católicos chinos".
Además el Cardenal ha subrayado la importancia de unirse a la actitud de la Virgen como viene representada en la estatua de la Virgen de She Shan, mientras que levanta a su Hijo presentándolo al mundo. El Card. Dias ha concluido la homilía en lengua china.
También el responsable de la Oficina inmigración de la Conferencia Episcopal Italiana - Cei ha tomado la palabra al final de la Misa, expresando la solidaridad y el saludo caluroso del Responsable de la Oficina y de los católicos italianos. Además ha demostrado la plana disponibilidad por parte de la Iglesia italiana de ayudar a los fieles que viven en Italia y también aquellos en China. Por último, el Card. Dias ha impartido la Bendición Apostólica en nombre del Papa Benedicto XVI.
En China más de mil fieles de Pekín y de tantas otras partes de China han subido al Santuario mariano de Hou Sang Yu y a otros vecinos a sus diócesis, para vivir este día de oración en comunión con la Iglesia universal. (NZ) (Agencia Fides 26/05/2008 - Líneas: 43 Palabras: 628)
