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Roma (Agencia Fides) - El proyecto Dream (acrónimo de Drug Resource Enhancement against SIDA and Malnutrition) programa de prevención, tratamiento y educación sanitaria, de lucha global contra la plaga del VIH y la malnutrición, nacido de la Comunidad de San Egidio, comenzó en el 2002 en Mozambique. Hoy está presente en muchos países del África subsahariana, con centros de acogida y laboratorios de biología molecular, que ofrecen tratamientos gratis a los enfermos de Sida y VIH y una terapia ad hoc para las mujeres embarazadas, con el objetivo de salvar sus vidas y la de los concebidos. Los resultados del proyecto han sido presentados en el curso del VI° Congreso Internacional, "Comunidad y salud: Dream un modelo para África", que ha tenido lugar en la Pontificia Universidad Gregoriana, y en el que estaban presentes Ministros de la Salud y representantes de numerosos países africanos.
Los resultados del proyecto Dream son extraordinarios: son diez los países en los que se ha extendido el proyecto, con 31 centros clínicos y 18 laboratorios de biología molecular, presentes en las áreas urbanas o rurales. Los pacientes asistidos son acerca de 50.000 y se registra un crecimiento de unas diez mil personas el año, que se dirigen a Dream. Unos 27.500 pacientes reciben la terapia con fármacos retrovirales y diez mil son hasta ahora los niños que se han curado, el grupo más numeroso en África. Se calcula que se ha llegado a un millón de personas con intervenciones directas e indirectas.
El Congreso internacional ha ofrecido la ocasión de escuchar experiencias de algunos responsables del proyecto Dream, en particular de Mozambique, Guinea Conakry, Malawi. "Somos capaces de hacer llegar la Coca Cola incluso en los ángulos más remotos del país" - ha dicho Inés Zimba Responsable de Dream en Mozambique - "¿por qué no podríamos hacer el mismo con los fármacos antirretrovirales?” Un llamamiento a los ministros de salud y a las casas farmacéuticas que la Comunidad de San Egidio, como ha recordado el prof. Marco Impagliazzo, Presidente de la Comunidad, ha hecho suyo. Inés Zimba cuenta que desde el inicio Dream ha utilizado la mejor combinación terapéutica disponible y los fármacos de última generación, para curar del mejor modo posible sin diferencias, a los pacientes.
Los centros de salud, no son sólo un punto de atención médica, sino sobre todo un "punto focal de encuentro y rotura del aislamiento", cuenta Kpakilè Felemou, Responsable Dream de Guinea Conakry. El enfermo es central, no sólo en su salud, sino en todo el entorno relacional en el que vive. Por ello, el primer objetivo es combatir la segregación y la marginación que una enfermedad como el Sida lleva consigo, y que para un paciente africano, agravado con las dificultades de la vida cotidiana, dificultades de desplazamiento y disponibilidad, resulta aún más difícil.
Dream, en África, ha hecho fructificar la unicidad africana y ha establecido con los habitantes un fuerte lazo de unión, que es el primer presupuesto para continuar con el tratamiento y para la curación. De hecho, la fidelidad al tratamiento se conquista implicando al paciente: por ello, los que trabajan en el proyecto Dream son habitantes del lugar, hablan a los pacientes en la lengua local. Los mismos pacientes participan en cursos de educación, con los que aprenden a controlar muchos aspectos de la vida, y se convierten a su vez en educadores en su propia familia. es realmente un "sueño" que se hace realidad, el de la curación y exaltación de la dignidad y la riqueza de África. (P.C) (Agencia Fides 16/5/2008; Líneas: 44 Palabras: 602)
