EUROPA/ITALIA - "La verdadera esperanza nos lleva dentro de la vida": una reflexión sobre la Encíclica Spe salva

miércoles, 14 mayo 2008

L’Aquila (Agencia Fides) - "La esperanza se manifiesta como el cumplimiento de una promesa. La esperanza es actual, es posible en la vida de cada uno de nosotros y a nuestro alrededor". Ha afirmado mons. Máximo Camisasca, fundador y superior general de la Fraternidad sacerdotal de los Misioneros de San Carlos Borromeo, nacidos del el carisma de Comunión y Liberación, sobre la Encíclica "Spe salvi" de Benedicto XVI, durante un encuentro organizado por la Pontificia Universidad Lateranense. La cita, con el título "La esperanza en diálogo con el mundo contemporáneo", se ha tenido el 13 de mayo en el instituto Superior de Ciencias Religiosas "Fides et ratio" de L’Aquila y forma parte del itinerario bíblico, filosófico y teológico denominada “hemos sido salvados en la esperanza", sobre la última Encíclica del Papa.
"La esperanza, como fue para Pedro, Juan y Andres con Jesús, es algo que crece y madura con el tiempo - ha continuado mons. Camisasca - hasta convertirse en un pensamiento habitual, motor del corazón con una nueva naturaleza. Precisamente viviendo con Jesús, los apóstoles aprendieron qué cosa era la esperanza para sus vidas, quién era la esperanza en sus vidas". He aquí porque es posible la esperanza para el hombre contemporáneo: "esperar es entrar en la acción del Espíritu desde dentro, desde la existencia cotidiana, sin huir de las dificultades concretas con las que nos encontramos o de los descubrimientos que vamos realizando. La esperanza verdadera no elude la vida, sino que nos lleva a adentrarnos en las cosas. El primer paso de la esperanza es no borrar lo que vivimos, pero llevarlo ante la presencia de Cristo y mirarlo como parte de su obra". (SL) (Agencia Fides 14/5/2008; Líneas: 21 Palabras: 294)


Compartir: