AFRICA/SUDÁN - Los presidentes de Sudán y Chad firman en la capital de Senegal un acuerdo para poner fin a las tensiones entre los dos países

viernes, 14 marzo 2008

Dakar (Agencia Fides)- Con un día de retraso los jefes de Estado de Chad y Sudán firmaron un tratado de no agresión para poner fin a las tensiones que desde hace cinco años caracterizan las relaciones entre los dos países.
El acuerdo fue firmado el 13 de marzo por el Presidente de Chad, Idriss Déby, y por su homólogo sudanés, Omar El-Béchir, en Dakar (Senegal), con ocasión de la apertura del Vértice de la Organización de la Conferencia Islámica, bajo el auspicio del Presidente senegalés Abdoulaye Wade, del decano de los Jefes de Estado Africano, el Presidente de Gabón Omar Bongo y del Secretario General de la ONU, Ban Ki-moon. Los dos países, afirma el inciso 4 del acuerdo, declaran de “comprometerse solemnemente a erradicar las actividades de todos los grupos armados y de prevenir el uso de nuestros respectivos territorio para desestabilizar uno u otro de nuestros Estados”.
Los otros puntos del tratado prevén: el compromiso de normalizar las relaciones entre los dos países; el respeto de los acuerdos precedentes (acuerdo de Trípoli del 8 de febrero de 2006, Declaración de Canes del 15 de febrero de 2007 y el acuerdo de Ryad del 3 de mayo de 2007); el pedido a la comunidad internacional y en particular a Libia, República Democrática del Congo, Senegal, Gabón, Eritrea, CEEAC (Comunidad Económica de los Estados de África Central) y a la Unión Africana de garantizar los acuerdos a través de una fuerza de paz que asegure la frontera entre los dos Estados; la creación de un Grupo de Contacto compuesto por los países garantes del acuerdo que se reunirán una vez al mes. Este organismo estará presidido por Libia y RDC.
Según un representante del gobierno senegalés, el nuevo acuerdo se complementa con los anteriores pues ofrece un mecanismo de verificación y garantía que hasta el momento no había sido previsto.
La firma del acuerdo de Dakar estaba previsto inicialmente pare el 12 de marzo pero el Presidente sudanés no se presentó en la capital de Senegal suscitando la incertidumbre de los observadores internacionales. Además desde Chad llegaban noticias no confirmadas de una columna de rebeldes en movimiento desde la frontera con Sudán hacía la capital N’Djamena, teatro de un tentativo de conquista en febrero por parte de una alianza de grupos apoyados por Sudán (ver Fides 4/2/2008).
La crisis en Chad ha estado al centro en la Cumbre extraordinaria de los Jefes de Estado y de gobierno de la CEEAC que se realizó en Kinshasa, en la RDC (ver Fides 10/3/2008). Al término de la sesión fue divulgado un comunicado en el que se condena “el recurso a las armas y a otros medios no constitucionales como modos de acceso al poder”. Los países miembros de la CEEAC, además, se han comprometido a enviar a Chad ayudas de emergencia para colaborar con la reconstrucción del País y han expresado su apoyo al despliegue de las tropas europeas del EUROFOR encargadas de proteger los campos de refugiados al este de Chad y de la República Centroafricana.
La crisis entre Chad y Sudán está ligada a la de Darfur, por la que la comunidad internacional se ha comprometido a favorecer el despliegue de una fuerza de paz mixta Unión Africana/ONU de 26 mil hombres. Según un reciente informe del International Crisis Group (Ver “Hoy en Internet” del 14 de marzo), es necesario prestar atención también al sur de Sudán, donde los acuerdos de paz del 2005 están en riesgo. (L.M.) (Agencia Fides 14/3/2008; líneas: 44 palabras: 603)


Compartir: