ASIA/CHINA - Año Nuevo chino como signo de la solidaridad cristiana y de la Evangelización

Roma (Agencia Fides) - El augurio de “todo bien y prosperidad” formulado el domingo pasado en el Ángelus por el Santo Padre Benedicto XVI a todos los países asiáticos que celebran el Año Nuevo lunar el 7 de febrero ha suscitado un gran entusiasmo entre los católicos chinos que están preparando la vigilia de Año Nuevo. Algunos sacerdotes y fieles de Pequín han manifestado a la Agencia Fides su alegría por los buenos deseos del Papa con estas palabras: “Gracias, Santo Padre por el afectuoso mensaje que nos ha mandado. Hagamos lo mejor para continuar ‘conservando y valorizando estas bellas y fructuosas tradiciones de vida familiar’ en beneficio de nuestro País, pero también de todo el mundo, que necesita tanto del valor de la familia. Además, llevemos el mensaje del Papa todas las personas que encontremos. Transformemos la fiesta pagana en una oportunidad para evangelizar, ¡para hacer que la gente comprenda cuánto nos ama Benedicto XVI!”.
En las diversas comunidades católicas del país se están intensificando las actividades de evangelización ligadas a los festejos por el Año Nuevo chino. De esta manera el anuncio evangélico se ha unido a las felicitaciones que la tradición china suele usar en fiesta. L aparroquia de la Catedral de Tian Jin, dedicada a la Inmaculada Concepción, y también la parroquia de San Miguel de la diócesis de Qi Qi Ha Er, han difundido la típica decoración roja (que se coloca en la puerta de la casa para crear una atmósfera de fiesta y de alegría) con un mensaje cristiano, y la están utilizando incluso los no cristianos. Se están utilizando también las imágenes cortadas con papel con forma de pez, pan, cruz, como los dibujos de historia de la Biblia.
Según un sacerdote chino que se ocupa de las comunidades de la diáspora, “en los últimos años, hemos visto cada vez más la inculturación de la comunidad china en los países que la acogen. Y el Año Nuevo chino es el momento privilegiado para promover esta inserción armónica y fraterna. Nosotros, los católicos, tenemos la responsabilidad ulterior de sostener este esfuerzo”. En realidad, muchas comunidades chinas, católicas y no católicas, que viven en la diáspora, están festejando el Año Nuevo junto a las comunidades locales en coordinación con las autoridades de cada lugar. (NZ) (Agencia Fides 5/2/2008; líneas 27, palabras 383)