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Ciudad del Vaticano (Agencia Fides) - Debido a los trágicos acontecimientos que se han producido en Kenia, el Santo Padre Benedicto XVI ha enviado una carta, por medio del Cardenal Secretario de Estado Tarcisio Bertone, al Presidente de la Conferencia Episcopal de Kenia, el Card. John Njue, Arzobispo de Nairobi, expresando su solidaridad por las víctimas e invitando a la paz y al diálogo. En el texto del mensaje, difundido el 5 de enero, se afirma que el Santo Padre ha seguido "con profundo dolor y aprensión" las violencias que se han verificado en el País africano, y ha pedido por ello al Card. Bertone que expresase al Presidente de la Conferencia Episcopal de Kenia "su unión y solidaridad con los hermanos Obispos y con todos sus conacionales, asegurando su oración para que esta gran tragedia termine pronto”.
"El Papa está espiritualmente cerca de todas las víctimas de esta violencia: de las numerosas personas que han perdido la vida, con frecuencia de modo atroz, de sus familiares en luto, de los heridos, de todos los desplazados o han tenido que abandonar su casa y todos los que están amenazados y todavía viven en el miedo" escribe el Card. Bertone en la Carta, asegurando que el Santo Padre confía las víctimas a la misericordia divina, y exhorta al Presidente de la Conferencia Episcopal "a ayudar generosamente a todos los que se encuentran en la angustia y necesidad. Su Santidad espera de todo corazón - que esta querida nación, cuya experiencia de tranquilidad y desarrollo social representa un elemento de estabilidad en toda la turbulenta región, aleje cuanto antes la amenaza de un conflicto étnico que continua causando tantos crímenes en algunas zonas de África".
El Santo Padre se une al Mensaje enviado por los Obispos de Kenia a todos los cristianos y a los hombres de buena voluntad "Os doy mi paz”, y suplica fin inmediato de los actos de violencia y del conflicto fratricida: "la violencia es un medio inútil para solucionar los problemas, no hace sino exacerbarlos y lleva a sufrimientos inauditos". Benedicto XVI lanza un llamamiento a los líderes políticos, "que son los responsables del bien común" y los invita "a emprender con decisión el camino de la paz y la justicia, puesto que el País necesita de una paz fundada en la justicia y la fraternidad". Además los anima "a solucionar las actuales dificultades para el diálogo y el debate democrático" teniendo en consideración las sugerencias prácticas ofrecidas por los Obispos en su Mensaje.
Por último, en la parte conclusiva de la Carta, recordando la reciente celebración de la Jornada Mundial de la Paz sobre el tema "Familia humana, comunidad de paz", el Papa expresa la esperanza de que todos los kenianos trabajen "para hacer el País cada vez más una familia en la que todos se sientan como hermanos y hermanas cuyas relaciones se caractericen por la justicia y el amor". Pide además a los creyentes "que pidan continuamente a Dios para obtener el gran don de la paz", enviando a todos una particular Bendición Apostólica. (S.L) (Agencia Fides 7/1/2008; Líneas: 38 Palabras: 546)
