ASIA/COREA DEL SUR - La reconciliación con Corea del Norte está más cerca: las esperanzas de la Iglesia Católica

jueves, 29 noviembre 2007

Seúl (Agencia Fides) - Las esperanzas de reconciliación y reunificación con Corea del Norte crecen cada día más. También son favorables el clima político y los cambios económicos. La comunidad católica debe hacer su parte tendiendo la mano a los hermanos pobres del Norte para ayudarlos y acogerlos. Es lo que se dijo en el 10º Forum católico para la reconciliación del pueblo coreano, organizado recientemente por la Comisión para la Reconciliación de la Conferencia Episcopal de Corea.
En los trabajos del Forum, centrados en el tema “La vida del cristiano y la ayuda a Corea del Norte”, participaron Obispos, sacerdotes, religiosos, laicos, agentes pastorales, voluntarios de Caritas, personas comprometidas en las obras de ayuda a Corea del Norte, además de representantes del gobierno, de las instituciones y de la sociedad civil coreana.
En su intervención durante la conferencia, el padre Paul Han Jeong-gwan, Secretario de la Comisión para la Reconciliación, afirmó: “La ayuda a Corea del Norte, sobre la base del amor cristiano, será la piedra angular para reconstruir la Iglesia y la misión en Corea del Norte. Es nuestro deber continuar los esfuerzos y promover iniciativas en esta dirección”.
El padre Damien Kim Young-nam, profesor de Teología bíblica de la Universidad Católica de Corea, destacó: “La reconciliación viene de Dios. La reconciliación de Dios en Cristo Jesús es la base para todas las demás: entre los individuos y las comunidades. Los cristianos deben reconocer humildemente en su corazón que la reconciliación es un don de Dios. La Iglesia coreana debe reconocer que el servicio para la reconciliación del pueblo coreano es uno de los grandes signos de los tiempos que la época histórica en la que vivimos solicita a la Iglesia”.
Entre los representantes del gobierno, participó Kim Jeong-su, director del Departamento para la Asistencia humanitaria y la cooperación del Ministerio de la Unificación, identificando al estancamiento económico como causa principal de la crisis que afecta a la población de Corea del Norte. Según el funcionario, en los próximos años no están previstos mayores avances, ya que continuarán los aluviones y el país está en riesgo de sufrir una nueva carestía.
Por ello, añadió el padre Baptist Kim Hun-il, Secretario ejecutivo de la Comisión para la Reconciliación, “el ayudar es una obligación desde el punto de vista del amor cristiano, pero también una contribución desde el punto de vista práctico, para aliviar el conflicto entre las dos naciones”. La ayuda humanitaria a Corea del Norte, concluyó el forum, “es un medio para asegurar nuestra fe y realizar gestos concretos de reconciliación”. (PA) (Agencia Fides 29/11/2007; líneas 33, palabras 441)


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