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Tabasco (Agencia Fides) - Tabasco, en el sur de México, vive la peor tragedia de su historia debido a las inundaciones en 15 de los 17 municipios del Estado, que han dejado más de un millón de damnificados, de los cuales miles todavía permanecen en los tejados de sus casas esperando a ser rescatados. Además han quedado destruidos casi la totalidad de los cultivos, lo que hace sumamente grave la situación en la zona. El representante del Gobierno ha afirmado que aún hay cerca de 280.000 personas que esperan la ayuda de las autoridades y que unas 70.000 casas no tienen energía eléctrica. las lluvias en Tabasco han llegado a niveles del 82 por ciento por arriba de su promedio normal en el mes de octubre, y a cinco veces más el nivel histórico en 24 horas, lo que hace que sea una de las peores inundaciones en los últimos 50 años. Los servicios de rescate continúan trabajando, para evacuar a miles de mexicanos que siguen atrapados y ante la alerta por una posible crisis sanitaria.
La Conferencia Episcopal de México ha emitido rápidamente un comunicado en el que invitan a realizar como Iglesia una colecta nacional y a manifestar la solidaridad además de unirse en oración con los hermanos afectados. “Cuando se trata de las emergencias en territorio nacional- se lee en el comunicado - la experiencia nos ha ido enseñando la importancia de apoyar, solidaria y subsidiariamente, las fases de rehabilitación y de reconstrucción. Sin embargo dada la magnitud de este desastre es necesario también intervenir directamente en esta fase de emergencia”. Consideran además los Obispos que estos fenómenos “terminan por descubrirnos el drama de la pobreza y su magnitud, así como la vulnerabilidad de millones de mexicanos que viven en sitios de alto riesgo porque la miseria y la pobreza los han orillado a ubicar a sus familias en zonas marginadas”.
El Cardenal Norberto Rivera Carrera, Arzobispo Primado de México ha realizado un llamamiento urgente a todos los miembros de esa Iglesia Particular: laicos, religiosos, religiosas, diáconos y presbíteros, “a participar en una gran cruzada de solidaridad para el pueblo tabasqueño”, pues “nadie puede permanecer pasivo ante esta tragedia”.
También la Diócesis de Saltillo ha organizado un Semana de Solidaridad con Tabasco del lunes 5 al viernes 9 de este mes de Noviembre, junto con la Comisión Diocesana de Pastoral Social, el Banco de Alimentos, y Cáritas. Para ello, el Obispso de la diocesis Fray Raul Vera Lopez, O. P. ha pedido que cada parroquia, rectoría, Colegios, Asociaciones, Movimientos Apostólicos, sean promotores de la solidaridad con la población tabasqueña, y sean también centros de acopio de los donativos en esta campaña. Así mismo pide a los párrocos, rectores de templo, directores y directoras de colegios, responsables de las asociaciones y movimientos, que coordinen la semana de solidaridad, en cada una de sus comunidades.
El Director de Cáritas Diocesana de Tabasco, el Pbro. Saúl de Jesús Solís, ha informado que desde el primer momento, Cáritas ha dado respuesta a través de las parroquias de la diócesis y se ha puesto en marcha una campaña impulsada por la Diócesis para convertir cada parroquia en un centro de acopio para poder canalizar la ayuda a las comunidades afectadas. (RG) (Agencia Fides 4/11/2007 Líneas: 40 Palabras: 571)
