Organo de informacion de las Obras Misionales Pontificias desde 1927
Roma (Agencia Fides) - A 40 años de la encíclica Populorum Progressio, con la que el Papa Pablo VI subrayó la importancia de la educación para la justicia y el desarrollo, evidenciando el agravamiento de la distancia entre los Países ricos y los pobres, una nueva desigualdad golpea las poblaciones más pobres. Es la llamada "diferencia digital", debida a la falta de acceso a las modernas tecnologías de la información y la comunicación.
Una de las iniciativas para remediar esta situación es el programa "One Laptop per Child", que ha sido el centro de la Conferencia "Audaces innovaciones en el campo de la educación", tenida ayer, lunes 29 de octubre, en Roma. Entre los relatores estaban Su Eminencia el Cardenal Paul Poupard, Presidente Emérito del Consejo Pontificio para la Cultura y el Prof. Nicholas Negroponte, fundador de los Medios de comunicación Lab del MIT (Massachussetts Institute of Technology) y uno de los promovedores del "One Laptop Per Child Foundation". La iniciativa ha sido promovida por la Comisión Internacional Justicia, Paz e Integridad de la Creación, la Comisión para la educación, el SEDOS y del Secretariado por la Comunicación de la Compañía de Jesús.
"La Conferencia se ha encuadrado en el cuadragésimo aniversario de la encíclica Populorum Progressio del papa Pablo VI. El Cardenal Poupard, en la época todavía un joven monseñor, es quien ha presentado el documento innovador, que subraya la importancia de la educación para la justicia y el desarrollo. El desafío del Papa continua manteniendo su plena actualidad: "Se debe afrontar la situación presente con valentía y se deben combatir y vencer las injusticias, que ella comporta. El desarrollo exige transformaciones audaces, intensamente innovadoras" afirma una nota de los organizadores.
El proyecto "One Laptop Por Child" está orientado a la proyección, producción y distribución de laptop (ordenador portátil), a coste contenido (el objetivo eran 100 dólares pero ha sido revisado al alza) para ofrecer a cada niño del mundo, especialmente a aquellos en los Países en vías de desarrollo, el acceso al conocimiento y a las modernas formas educativas, partiendo de tres ideas sencillas. La primera es que sólo llenando la enorme diferencia cognoscitiva podrán los Países pobres acercarse el desarrollo del mundo rico. La segunda es que este proceso debe partir de la infancia, o sea de la educación de base. La tercera es que el ordenador es el principal vehículo de transmisión de conocimientos. (L.M) (Agencia Fides 30/10/2007 Líneas: 31 Palabras: 417)
