OCEANIA/AUSTRALIA - Caroline Chisholm, laica comprometida en el apostolado social en Australia, hacia la gloria de los altares

miércoles, 24 octubre 2007

Sydney (Agencia Fides) - En el 2008 la comunidad católica australiana pedirá la abertura del proceso de Beatificación de Caroline Chisholm, laica inglesa que dedicó su vida al apostolado social en Australia. Caroline es conocida como "la amiga de los emigrantes" por su incansable labor de asistencia a las familias pobres de emigrantes, llegadas a Australia desde el extranjero en busca de fortuna, y sobre todo por su labor a favor de las chicas sin techo y de las madres solteras en los suburbios de Sydney.
Se ha elegido el 2008 porque es el año en que recurre el 200° aniversario de nacimiento de Caroline (1808-1877): la Iglesia australiana tiene en mente lanzar una vasta obra de sensibilización e investigación para pedir a la Congregación para las Causas de los Santos la apertura de la fase diocesana del Proceso.
Nacida en Inglaterra, a la edad de 22 años Caroline se casó con el Capitán Archibald Chisholm, de la Compañía de las Indias Orientales. Viajó pues hacia Oriente: primero a India, luego, en 1838, su familia se trasladó a Australia, en la colonia del Nuevo Gales del Sur, en los alrededores de Sydney. Aquí Caroline empezó a tener conocimiento de las condiciones inhumanas en las que vivían las colonias de emigrantes, en barracas ruinosas, en la miseria más grande, y se entregó completamente, implicando también al gobernador de Sydney para mejorar sus condiciones. Animada por una ferviente fe católica, su apostolado se dirigió sobre todo a las jóvenes, a las cuales buscaba restituir su dignidad proporcionándoles una casa, un trabajo, una instrucción, arrancándolas de la red de explotación y semi-esclavitud en la que con frecuencia se veían reducidas.
La campaña para abrir el proceso de Beatificación prevé la impresión de material informativo, folletos e imágenes, con una oración compuesta por Caroline, y también el lanzamiento de un sito web. Chisholm fue siempre una persona muy estimada y apreciada por la población en la historia de Australia. El gobierno australiano apoya a la Iglesia católica en esta campaña: después de la australiana Suor Mary MacKillop, Caroline sería ciertamente la segunda "australiana adoptada" que sería elevada a la gloria de los altares.
A pesar de algunos problemas de los procedimientos que se presentan (Caroline murió en Inglaterra) los promotores de la Causa parecen confiados: "Su fe y su dedicación al prójimo fueron extraordinarias. No creo que cuánto hizo sea posible sólo con los esfuerzos humanos. Caroline respondió a una llamada del Espíritu Santo, para afrontar según una modalidad cristiana los problemas sociales de su tiempo" ha señalado Clara Geoghegan, portavoz de la asociación "Amigos de Caroline", que se encargará de divulgar su historia. Ya existen calles, barrios, centros de instrucción, hospitales, obras sociales en muchos lugares de Australia dedicados a Caroline. (PA) (Agencia Fides 24/10/2007 Líneas: 36 Palabras: 475)


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