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New York (Agencia Fides) - Con una celebración realizada al otro lado del Océano, en New York, la Iglesia coreana recordó el 80º aniversario del a fundación de la diócesis de Pyongyang, capital de Corea del Norte, expresando la esperanza y el deseo de poder revitalizar la comunidad católica en la península coreana, al norte del paralelo 38.
La ceremonia fue organizada y realizada en casa propia por los Misioneros de Maryknoll, que han contribuido inmensamente a la evangelización de Corea, incluso sufriendo muchas pérdidas humanas luego de la expulsión de los misioneros de Corea del Norte, con la llegada del régimen comunista.
Hoy, la Iglesia católica en Corea del Sur, luego del reciente acuerdo firmado entre los gobiernos de las Coreas para una distensión de las relaciones económicas, sociales y políticas, espera que puedan abrirse nuevos espacios para hacer germinar nuevamente la semilla de la fe en Corea del Norte.
En la ceremonia de aniversario estuvieron presentes S. Em. el Card. Nicholas Cheong, Arzobispo de Seúl y Administrador Apostólico de Pyongyang, que celebró una Santa Misa con la presencia de numerosos sacerdotes, religiosos y fieles coreanos y de otras nacionalidades. El Cardenal exhortó a los presentes a comprender la difícil situación que vive la población norcoreana y a rezar por los hermanos y hermanas de Corea del Norte: “Es nuestro deber recordar y apoyar a aquel pequeño grupo de fieles católicos que ha quedado en Corea del Norte, que ha vivido un largo silencio, luego de la división de la península”, afirmó, recordando también la generosa contribución de 92 misioneros de Maryknoll que han dedicado su vida a la evangelización de Corea del Norte.
La Prefectura Apostólica de Pyongyang fue erigida en 1927, siendo luego constituida en Vicariato Apostólico en 1939. Sucesivamente, con la institución de la jerarquía en Corea, fue elevada a diócesis en 1962.
En el sur, la Iglesia católica promueve desde hace años la “Jornada por la Unidad y la Reconciliación del Pueblo Coreano” y ha buscado tener vivas las relaciones con el Norte, organizando visitas de delegaciones católicas, sobretodo ligadas a las actividades de cooperación con áreas del Norte y a la ayuda humanitaria brindada a través de Caritas.
Las esperanzas de la Iglesia en Corea del Sur de poder volver a evangelizar y hacer florecer la fe en Corea del Norte nunca se han apagado, ni siquiera en tiempos difíciles: Seúl tiene para este fin al Vicario Episcopal para la diócesis de Pyongyang, dedicado a impulsar la reconciliación y la unificación en la península coreana. Numerosos sacerdotes coreanos se han mostrado disponibles a desarrollar su servicio pastoral en la diócesis de Pyongyang, y todos han expresado el deseo de trabajar por la reconciliación en Corea.
Ha comenzado al norte un tímido reflorecimiento de la Iglesia católica luego de 1989, cuando al religión católica tuvo su reconocimiento al aparecer la “Asociación Católica de Corea del Norte”, controlada por el gobierno. Hoy, los católicos norcoreanos viven la fe en un contexto familiar, orando en casa y recibiendo cada cierto tiempo las visitas de los representantes de la Asociación Católica. Según la Iglesia del Sur, existen actualmente en Corea del Norte cerca de treinta mil católicas y una única iglesia, en Pyongyang. (PA) (Agencia Fides 18/10/2007; líneas 42, palabras 566)
