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Varsovia (Agencia Fides) - “Creo que este Congreso ha servido para reforzar en todos los participantes el deseo de trabajar sin descanso para que los gobiernos, instituciones políticas y legislaciones de todos los países reconozcan el papel insustituible de la familia y la apoyen de modos diversos para que pueda cumplir con su función”, afirma Lola Velarde, Presidenta de la Red Europea del Instituto de Política Familiar (IPF) al termino del IV Congreso Mundial de las Familias que se ha celebrado del 11 al 13 de mayo en Varsovia, Polonia, (ver Fides 3/5/2007) y en el que han participado más de 3.300 personas de asociaciones familiares de mas de 60 países de todo el mundo. “El ambiente ha sido de gran cordialidad - continua Lola Velarde - muy variada la asistencia en cuanto a edades procedencias geográficas (más de 60 países) y a confesiones religiosas (católicos, protestantes, mormones, y también aunque en menor número, judíos y musulmanes), si bien al celebrarse en Polonia, ha sido muy destacada la presencia católica y la querida y admirada figura del Siervo de Dios, Juan Pablo II, ha estado constantemente presente. Ha sido muy edificante escuchar a los políticos polacos hablar con tanta claridad como valentía de su apoyo incondicional a la familia y a la vida humana desde el momento de su concepción hasta la muerte natural”.
“La importancia y el alcance del IV Congreso Mundial de las Familias, se ha visto refrendada no sólo por el escrito de apoyo de más de 100 eurodiputados de 21 países y que se ha leído durante la jornada de inauguración, o por la petición expresa del Vice-Primer Ministro polaco, Roman Giertzch, que ha reclamado una Carta de los Derechos de la Familia en Europa, sino también por la propuesta unánime de más de 3.300 personas e instituciones que han aprobado la “Declaración de Varsovia”.
En efecto durante el Congreso el Presidente de Polonia, Lech Kaczynski, quien ostentaba la presidencia de honor del Congreso, reclamó durante la jornada inaugural, una Carta de los Derechos de la Familia en Europa. Además se ha aprobado la “Declaración de Varsovia” en la que se pide a todos los gobernantes e instituciones políticas que: incorporen la perspectiva de familia en las políticas públicas como un bien social irrenunciable y como servicio a sus propias naciones; protejan la vida de todo ser humano desde el momento de su concepción hasta su muerte natural; insistan en el reconocimiento de la educación de los niños como un derecho fundamental de los padres; protejan a los jóvenes del proceso de pérdida de valores morales; y promuevan soluciones económicas que permitan unas condiciones de vida dignas a todas las familias.
Los asistentes al Congreso han solicitado asimismo que, como consecuencia de dicha Declaración, se proclame el año 2008 como el Año para la Familia.
“Estos congresos -. Concluye Lola Velarde - son muy edificantes, sirven para que las asociaciones familiares se encuentren unas con otras, adquieran nuevas ideas y sobre todo se refuercen unas a otras al ver que no están solas, sino que sus empeños e ideales son compartidos por muchísimas personas”. (RG) (Agencia Fides 18/5/2007 Líneas: 41 Palabras: 555)
