AMERICA/ECUADOR - “La autoridad no se impone, es humilde y generoso servicio a los demás. La obediencia no se consigue con la fuerza sino con el diálogo. El respeto y el prestigio se alcanza no con la violencia que divide sino con la paz que une a todos”. Llamamiento de los Obispos ante la situación del país

lunes, 2 abril 2007

Quito (Agencia Fides) - “La Conferencia Episcopal Ecuatoriana, empeñada siempre en la búsqueda del bienestar de todos los ecuatorianos y atenta a la estabilidad política de la Nación, mira con angustia la situación que estamos viviendo, el comportamiento de los máximos representantes del País y el atropello de la Constitución y de la Ley, y hace un nuevo llamado a la ponderación y la ecuanimidad”, es el llamamiento lanzado por los Obispos de Ecuador por medio de un comunicado titulado “No destruyamos el país”, publicado el domingo de Ramos 1 de abril, ante la situación que está viviendo el país.
Según explican los Obispos, la campaña electoral del país, que culminó con la elección del actual Presidente, “se caracterizó por la insistencia en pedir un cambio de la estructura del Estado para acabar con la corrupción y los defectos del pasado”, planteando una consulta popular que lleve a una nueva Constitución. Sin embargo, esta aspiración del pueblo ecuatoriano, ha encontrado la oposición de algunos sectores políticos que han tratado de impedirlo y esta generando una confrontación, “caracterizada por un lenguaje violento, el atropello a la ley y la manipulación de personas e Instituciones” y que está llevando al País a su descomposición. “No se puede ver un adversario en todo el que piensa diferente o discrepa en puntos de vista, tampoco se puede calificar de oposición a todo planteamiento distinto aunque sea contrastante. Se han de acoger como aportes para la reflexión y la discusión a fin encontrar la verdad, el consenso y la unidad, aspectos fundamentales de la democracia”, continúa el texto.
Los Obispos afirman que no se busca vencedores ni vencidos en esta lucha, sino más bien “hermanos luchando juntos por un porvenir mejor, por una Patria nueva pero enmarcada en el derecho y el respeto mutuo”. Por ello lanzan un llamamiento: “Basta ya de atropellos, de insultos, de acusaciones, de retaliaciones. La autoridad no se impone, es humilde y generoso servicio a los demás. La obediencia no se consigue con la fuerza sino con el diálogo. El respeto y el prestigio no alcanza un Gobierno con la violencia que divide sino con la paz que une a todos”. Con motivo del inicio de la Semana Santa, “tiempo privilegiado para la oración, la reflexión y la reconciliación”, piden los Obispos que “Dios abra la mente y el corazón de gobernantes y gobernados y propicie el acercamiento, la unión y la fraternidad de todos los ecuatorianos para construir de veras una Patria nueva, un Ecuador grande y un Pueblo digno y respetable”. (RG) (Agencia Fides 2/4/2007 Líneas: 33 Palabras: 480)


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