ASIA/MONGOLIA - Monjas misioneras coreanas abren un Centro Pastoral en Ulaanbataar para los jóvenes de las áreas rurales

lunes, 5 marzo 2007

Ulaanbataar (Agencia Fides) - Una comunidad de religiosas misioneras coreanas ha abierto un nuevo centro pastoral en Ulaanbataar, dedicado de modo especial a la instrucción de los jóvenes de las áreas rurales. En un edificio de tres planes en la periferia de la capital, las religiosas de la Congregación de Jesús, CJ, han creado el "Mary Ward Center", que acogerá sobre todo a los jóvenes de las áreas rurales que quieran seguir un recorrido de instrucción en ciudad. El Centro está también dotado de un espacio dedicado a los jóvenes y niños, para actividades lúdicas y culturales. Anexa está la casa de las religiosas y una capilla, abierta a todos los que quisieran rezar y encontrar recogimiento espiritual. El Centro, explican las religiosas, quiere ser también como un corazón pulsante de testimonio y evangelización, al servicio de los niños y jóvenes. Como explica Sor Laurentia, Superiora de la comunidad, la estructura ha nacido para satisfacer las exigencias de los jóvenes que se desplazan desde las áreas rurales a la capital por motivos de estudio, y que con frecuencia se encuentran en situaciones peligrosas, ligadas a la criminalidad o prostitución. El Centro podrá albergar unos cuarenta jóvenes. En segundo lugar estaba la exigencia de ocuparse de la educación de los niños, que será atendida por las mismas religiosas, según el carisma principal de su congregación. A menudo las religiosas ofrecen servicios de instrucción a chicos de familias pobres o en dificultad, que no pueden permitirse enviar a sus hijos a la escuela.
En Mongolia las religiosas ya trabajan en el sector, enseñando a los chicos en los locales de la Catedral de San Pedro y Pablo. Ahora trasladan su actividad al nuevo Centro Pastoral Mary Ward.
Entre las órdenes femeninas, además de la Congregación de Jesús, también están presentes en Ulaanbataar las Misioneras de la Caridad, de la Madre Teresa y las Hermanas de San Pablo de Chartres. La comunidad católica en Mongolia cuenta en total con 370 fieles y está echando raíces en todo el país, como demuestran las nuevas estaciones misioneras en las ciudades de Darkhan, Erdenet y en otra provincia al Sudoeste de la capital. Actualmente trabajan en Mongolia 56 misioneros, de diversas órdenes masculinas y femeninas, procedentes de 14 países del mundo. (PA) (Agencia Fides 5/3/2007 Líneas: 28 Palabras: 393)


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