Ciudad del Vaticano (Agencia Fides) - «Participar y contribuir a la Jornada Mundial de las Misiones es un acto de misión, generosidad y solidaridad. A través de ello, proclamamos y difundimos la buena nueva», afirma el cardenal Luis Antonio Gokim Tagle, pro-prefecto del Dicasterio para la Evangelización, Sección para la Primera Evangelización y las Nuevas Iglesias Particulares. En un vídeo de unos seis minutos producido por JESCOM (Jesuit Communications Foundation), compuesto por imágenes, palabras y citas del Magisterio de la Iglesia, el cardenal explica el origen y el sentido de la Jornada Mundial de las Misiones, deteniéndose en la misión de las cuatro Obras Misionales Pontificias (OMP) y, especialmente, en la motivación de la participación de los católicos en este día dedicado a las misiones.
«Es una jornada de oración, reflexión y apoyo a las actividades misioneras de la Iglesia en los 1.124 territorios de misión», señala el cardenal Tagle. «Estas Iglesias locales son todavía jóvenes y muchas enfrentan pobreza, conflictos armados e incluso persecuciones. Por ello, la Iglesia universal les presta asistencia, y un instrumento esencial de esta solicitud son las Obras Misionales Pontificias».
El cardenal Tagle explica que los fondos recaudados durante la Jornada Mundial de las Misiones por las Direcciones Nacionales de las OMP se destinan al Fondo de Solidaridad Universal, supervisado y coordinado por las Secretarías Internacionales de las OMP, que cada año, en su Asamblea General, deciden los proyectos que sostener. Las principales áreas de inversión incluyen la formación de seminaristas, sacerdotes y religiosos, el acceso a educación católica, la asistencia sanitaria y pastoral, la formación de catequistas y animadores laicos, y la construcción de iglesias, escuelas y centros misioneros.
Citando el rescripto de la Sagrada Congregación de Ritos del 14 de abril de 1926, el cardenal Tagle recuerda que esta Jornada es un signo visible de la comunión entre los católicos. «Es una forma de que cada uno de nosotros responda al mandato del Señor, porque nuestras ofrendas permiten a los misioneros proclamar la buena nueva a personas de diferentes culturas y religiones», afirma.
Finalmente, haciendo referencia a la encíclica Redemptoris Missio (62) de Juan Pablo II, subraya la importancia del vínculo entre la Iglesia universal y las particulares, entre la Iglesia más antigua y la más joven, en la misión común de la Iglesia mundial. La conclusión del vídeo se basa en una cita de la encíclica Spe Salvi (2) de Benedicto XVI: «El Evangelio no es una simple comunicación de cosas que se pueden conocer. Es una comunicación que hace que las cosas sucedan y cambia vidas. Es una comunicación de esperanza», comenta el cardenal Tagle.
(EG) (Agencia Fides 9/10/2025)
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