ASIA/CHINA - La misión entre los trabajadores inmigrantes de la parroquia del Sagrado Corazón de Cixi, 100 años después de su fundación

Ningbo (Agencia Fides) – Gratitud, transmisión de la fe y misión: son las tres palabras clave que Francesco Saverio Jin Yangke, obispo de la diócesis de Ningbo (provincia china de Zhejiang), ha puesto en el centro de su homilía durante la liturgia que ha dado inicio a las celebraciones por los 100 años de la fundación de la parroquia de Xushan, dedicada al Sagrado Corazón de Jesús (1925-2025).

El 28 de junio comenzó un mes de iniciativas y celebraciones, convertido en ocasión para recorrer la historia de la parroquia y los cambios que han marcado la labor misionera de los feligreses, dispuestos a responder a los «signos de los tiempos» en un contexto transformado en las últimas décadas por el crecimiento económico, los procesos de urbanización y la inmigración interna y extranjera.

Durante este mes de celebraciones, también se han conmemorado los 18 años de la inauguración de la «Casa de los Fieles», un espacio pastoral destinado a acoger y acompañar a los trabajadores católicos inmigrantes.

Cixi es una ciudad con rango de condado en la rica provincia de Zhejiang, una de las primeras en el país por producto interior bruto. Situada en el delta del río Yangtsé, atrae a numerosos trabajadores, tanto chinos como extranjeros, por su industria de hardware y electrodomésticos. La mitad de sus dos millones de habitantes son trabajadores inmigrantes. Precisamente para ellos, el 1 de junio de 2007 se inauguró en la parroquia de Xushan la «Casa de los Fieles», un punto de referencia para conservar la pertenencia eclesial y recibir apoyo en el testimonio de fe, también en el ambiente laboral.

Estudios y momentos de compartir durante los fines de semana, visitas de caridad, catequesis, peregrinaciones y adoración comunitaria conforman las actividades que, con el tiempo, se han consolidado en torno al Centro. En su primer año de actividad se registraron 13 bautismos entre trabajadores inmigrantes participantes en sus iniciativas.

Durante el Año Paulino, proclamado por el Papa Benedicto XVI entre 2008 y 2009, se organizó una peregrinación y un curso de estudio de las Cartas de San Pablo para «dar a conocer a Cristo a todos». Hoy, la Casa de los Fieles se ha convertido en parte esencial de la vida comunitaria de la parroquia, registrando cada año unos 10 nuevos bautismos entre los trabajadores inmigrantes.

La solemne eucaristía del 28 de junio, que abrió las celebraciones por el centenario de la parroquia, contó con la participación de 29 religiosas, 29 sacerdotes concelebrantes y más de 800 laicos procedentes de las cinco parroquias del decanato de Cixi y de las doce estaciones misioneras de la parroquia de Xushan.

En su homilía, el obispo Francesco Saverio Jin repasó la historia y las vicisitudes de la parroquia, subrayando las palabras clave: «gratitud al Señor y a todos los que han contribuido, en particular a esos devotos silenciosos y creyentes valientes que han dedicado su juventud a la promoción del Evangelio del Reino»; la «transmisión de la fe auténtica», custodiada por la Tradición de la Iglesia, que es «la savia vital para el desarrollo de la diócesis y de la parroquia»; y la «misión», con un llamado a todos a «ser valientes» en el testimonio de la fe y en «cuidar de los demás y servir a la comunidad».
(NZ) (Agencia Fides 8/7/2025)

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