ASIA/COREA - El sueño roto del reencuentro de familias divididas por el "río helado"

sábado, 22 julio 2023 Áreas de crisis   guerras   familia   geopolítica   historia  

KTV blog - KEI

Pyongyang (Agencia Fides) - El último encuentro fue en 2018. En esa experiencia que la política define como "reunificación familiar" entre personas divididas por la frontera entre Corea del Norte y Corea del Sur, están las lágrimas, los abrazos, los sufrimientos y las alegrías de hermanos y hermanas, esposos y esposas, hijos y padres que “el telón de bambú”, -o la frontera que cruza la península de Corea en el paralelo 38-, ha dividido desde 1953. Desde 2018, cinco años de silencio. También la reciente propuesta de organizar una nueva reunión, lanzada en septiembre de 2022 por el gobierno de Seúl, cayó en saco roto. Ahora muchos coreanos, en el Sur y en el Norte, esperan que con motivo del 70 aniversario de la firma del armisticio que puso fin a la guerra de Corea el 25 de julio de 1953 puedan volver a planificar una reunión entre familias divididas.

Las reunificaciones familiares, reuniones de varias horas auspiciadas por los gobiernos de Corea del Norte y Corea del Sur, son una cuestión humanitaria de carácter emotivo. Son personas mayores, todas mayores de ochenta años, que tienen el deseo de volver a ver a sus familiares al menos por última vez antes de morir. Las dolorosas fracturas familiares se remontan a los acontecimientos de 1945 cuando se dividió la península de Corea. Unos años más tarde, en 1950, estalló la Guerra de Corea y millones de ciudadanos coreanos huyeron de norte a sur en busca de libertad y dignidad. Quizás nunca pensaron que no volverían a ver y abrazar a sus familiares. Ante la necesidad expresada en ambos lados de la frontera, a partir de 1971 la Cruz Roja Coreana se encargó de organizar una campaña de búsqueda de familiares separados. Desde entonces muchas personas han expresado su deseo de ser sobre sus familiares vivos, de quienes nunca más habían vuelto a saber, para conversar y reencontrarse.

Un histórico y exitoso programa de televisión fue pionero en estas reuniones. En 1983, con motivo del 30 aniversario del fin de la Guerra de Corea, el Korean Broadcasting System (KBS) creó y transmitió el programa "Finding Dispersed Families" entre junio y noviembre de 1983. El programa de televisión tenía como objetivo reunir a las familias coreanas separadas por la partición de la península. Inicialmente filmado en la sede de KBS en Seúl, debido al éxito generalizado pronto se expandió a nivel nacional. Al canal llegaron un ingente número de solicitudes para aparecer en el programa que se transmitió durante 453 horas y 45 minutos, en 138 días. Participaron 53.000 personas, incluidas más de 10.000 familias que localizaron a un familiar al otro lado de la frontera. La retransmisión recibió reconocimiento internacional y desde 2015 está en el registro de la "Memoria del mundo" de la UNESCO.

El impacto que tuvo en el pueblo coreano fue profundo. Por primera vez los medios de comunicación masiva fueron utilizados para contribuir al proceso de reunificación de la posguerra y la retransmisión resultó ser fundamental para la comunicación entre Corea del Norte y Corea del Sur. Para el gobierno de Seúl, ese programa se convirtió en una oportunidad para restablecer contactos y reabrir conversaciones con el Norte para fomentar las reuniones de reunificación familiar en la zona desmilitarizada, la franja de territorio que separa a las dos naciones.

De aquí surgieron los encuentros de familias divididas. La Cruz Roja logró organizar, con el consentimiento de los dos gobiernos, un intercambio de visitas domiciliarias entre artistas en Seúl y en Pyongyang en septiembre de 1985. La cuestión permaneció en la agenda política, aunque el enfoque de cada gobierno fue diferente. El gobierno de Corea del Norte no separó la cuestión humanitaria de la política mientras que el gobierno del Sur intentó desvincular estos encuentros de cualquier tinte político promoviéndolos únicamente como iniciativas de carácter humanitario y social.

Un punto de inflexión se produjo en 2000 cuando, con el lanzamiento de la llamada “sunshine policy”, -la política de deshielo y acercamiento mutuo inaugurada con la reunión entre el presidente de Corea del Sur, Kim Dae Jung, y el líder de Corea del Norte, Kim Jong-il-, se produjo la primera reunificación familiar oficial inmediatamente después de la cumbre intercoreana de agosto de ese año.

Después hubo unas 20 reuniones cada año y en 2009 el gobierno de Seúl aprobó una ley específica sobre la promoción de reuniones de familias divididas. Al mismo tiempo, el Ministerio de Unificación y la Cruz Roja Coreana lanzaron un "Sistema de Información Integrado para Familias Separadas" especial, una plataforma online para ayudar a las familias separadas a encontrarse y entablar una comunicación. El proceso parecía consolidado. Realidades asociativas como la Inter-Korea Separated Family Association o la Cruz Roja Coreana mantuvieron los canales abiertos y también organizaron reuniones virtuales, asegurándose de que los miembros de la familia pudieran intercambiar cartas, hacer videollamadas o incluso encontrarse con familiares en terceros países a través de intermediarios chinos. La última reunión entre familiares se llevó a cabo del 20 al 26 de agosto de 2018, inmediatamente después de la cumbre intercoreana en Panmunjon. Los surcoreanos que se beneficiaron de ese encuentro, -eran 89 del Sur, mientras que 83 procedían del Norte-, fueron elegidos por sorteo: el mayor tenía 101 años. Desde entonces, con el endurecimiento de las relaciones bilaterales, también se han suspendido las reuniones familiares.

Después de varios años, el ministro de Unificación, Kwon Young-se, intentó revivir la cuestión en septiembre de 2022, declarando que "el Sur y el Norte deben afrontar las partes dolorosas de la realidad. Debemos resolver el problema antes de que desaparezca el término 'familias separadas'", dijo, y pidió "medidas rápidas". Dos días antes del Chuseok, la fiesta de Acción de Gracias que se celebra en ambas Coreas, Kwon afirmó que Corea del Sur espera que los funcionarios de las dos Coreas "puedan reunirse lo antes posible" para una discusión franca sobre el tema. El tema encaja en un marco más amplio: desde que asumió el cargo en mayo de 2022, el gobierno de Corea del Sur, encabezado por el presidente Yoon Suk Yeol, ha ofrecido un plan masivo para apoyar al Norte a cambio de la desnuclearización.

El Gobierno de Pyongyang respondió que no son posibles nuevos encuentros "hasta que Estados Unidos abandone sus políticas hostiles hacia el Norte". Nunca se levantó el cierre de fronteras a causa de la pandemia, señalado como un obstáculo para la reanudación de las reagrupaciones familiares que aún siguen siendo un “sueño roto”.

El poeta coreano Kim Tong-hwan (1091-1958) habló del "sueño" de las familias coreanas en un conmovedor poema titulado "Cuando el río helado se derrita". La referencia es al río Han que, en el último tramo de su curso antes de desembocar en el Mar Amarillo, marca la frontera entre Corea del Sur y Corea del Norte. El río Han es un símbolo de la unidad perdida porque está formado por la confluencia del río Namhan (procedente del sur) y el río Bukhan, que nace en las laderas del monte Geumgang, en Corea del Norte. Las dos ramas se encuentran en la provincia de Gyeonggi-do, y desde ese punto, la vía fluvial se conoce como el río Han.

Cuando el río helado se derrita, llegará un barco. 

Mi amor debe haber abordarlo. 

Aunque no esté presente, su carta me llegará. 

Hoy esperé junto al río, pero fue en vano. 

Cuando venga mi amor, mi dolor se desvanecerá. 
En el invierno helado, el río congelado 

se derretirá por sí mismo, sin que mi mente lo imagine. 

Hoy esperé en la orilla del río, pero fue en vano.

[Kim Tong-hwan]

(P.A. Agenzia Fides 22/7/2023)

Divided Families Foundation


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