Bujumbura (Agencia Fides) Ha vuelto la calma a Bujumbura, capital de Burundi, después del bombardeo de ayer, martes 15 de julio, que afecto sobre todo al barrio de Gihosba. “Hay tan solo esporádicas escaramuzas en zonas periféricas” refieren a la Agencia Fides fuentes de la Iglesia local que por motivos de seguridad desean permanecer en el anonimato. “La ciudad está lentamente volviendo a la normalidad; las tiendas y oficinas están reabriendo las puertas, pero es difícil olvidar los terribles momentos vividos en el último periodo a causa de la verdadera lluvia de bombas caídas durante una semana” dice la fuente de Fides. “Los rebeldes de Rwasa FNL, la facción guerrillera que asedia la capital (ver ficha “Una guerra decenal”), son unos irresponsables porque bombardean al azar sin preocuparse de las victimas civiles. En una semana han muerto al menos 200 personas, la mayoría inocentes”.
Según fuentes de las Naciones Unidas los recientes enfrentamientos han provocado entre 7.000 y 15.000 evacuados. “Estas personas están sufriendo hambre y sed, porque se han visto obligadas a abandonar de improviso sus casas sin poder llevarse nada. Son sobre todo los niños los que más sufren debido a las bajas temperaturas nocturnas” afirman las fuentes de Fides. “Los evacuados son abandonados a si mismos y se las arreglan como pueden. Tan sólo las parroquias han organizad actividades de distribución de alimento y vestido”.
Aunque los combates han terminado de momento, la tensión permanece alta, hasta el punto que Estados Unidos ha evacuado su sede diplomática. “La gente vive con el miedo de nuevos bombardeos” refieren las fuentes de Fides. “Los rebeldes pueden volver de un momento a otro y los continuos saqueos por parte de bandas armadas agrava la situación. Además de entrar en las casas para depredar todo, estos grupos organizan puestos de bloqueo improvisados para saquear a los que pasan quitándoles incluso la ropa”. (L.M.) (Agencia Fides 16/7/2003 Líneas: 28 Palabras: 335)