ASIA/PAKISTÁN - Reconstrucción después de las inundaciones: el gobierno ignora a los refugiados cristianos

jueves, 11 noviembre 2010

Karachi (Agencia Fides) - "Han comenzado las reconstrucciones después de las inundaciones pero el gobierno ha abandonado a unas 20 mil familias cristianas desplazadas. La discriminación continúa. Sólo las iglesias cristianas y unas pocas Ong de inspiración cristiana se están ocupando de ellos": lo denuncia a la Agencia Fides el p. Mario Rodríguez, Director de las Obras Misionales Pontificias en Pakistán.
"Una vez terminadas las inundaciones, - dice el sacerdote - el país está viviendo ahora la difícil fase de la reconstrucción. Existen grandes dificultades, porque los fondos a disposición del gobierno no son suficientes (ver Fides 29/10/2010). Por otra parte, se continua con la gestión de la situación de emergencia, con la distribución de alimentos y con la lucha contra el deterioro de las condiciones sanitarias, que se caracteriza por la presencia de enfermedades peligrosas como el dengue y el cólera".
Pero, Según lo que sucede siempre en la sociedad paquistaní, "en esta fase, los cristianos son abandonados y marginados, son los últimos de la lista. No son dignos de atención ni de parte del gobierno ni de las autoridades provinciales. Por esta razón, la Iglesia se está centrando en ayudar a las familias cristianas que de otra forma estarían destinadas a la miseria más profunda, con graves riesgos para su supervivencia", explica el P. Rodrigues.
"Los refugiados cristianos están distribuidos por todo el país, especialmente en las provincias de Sindh, Punjab y algunos en las zonas del norte, en Khyber Pakhtunkhwa (ex Frontera Noroeste). Punjab vive la peor situación de todas, donde las autoridades gubernamentales son hostiles a los cristianos y no parecen tener ninguna intención de ayudarles".
La reconstrucción de una casa cuesta alrededor de 200 mil rupias (unos 20.000 dólares) y por ello, Caritas de Pakistán ha hecho un llamamiento a los donantes de todo el mundo para recaudar fondos suficientes para reconstruir las casas de 20 mil familias cristianas. Además de las casas, hace falta bonificar las tierras y liberarlas del lodo, condiciones esenciales para su reutilización para la agricultura.
Las iniciativas gubernamentales, tales como la "tarjeta del refugiado" se están ahogando en una práctica de corrupción y mala administración, causando descontento (ver Fides 8/11/2010 y 12/10/2010). P. Mario, como portavoz de los miles de refugiados cristianos, concluye: "El gobierno paquistaní está sólo atento a las necesidades de los terratenientes ricos y no se ocupa de las masas de pobres y desposeídos, que han perdido todo. Y entre todos ellos, los cristianos son los más pobres entre los pobres". (PA) (Agencia Fides 11/11/2010)


Compartir: