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Pekín (Agencia Fides) - Junto con la Iglesia universal, siguiendo las indicaciones del Papa, el mundo católico chino ha celebrado la Jornada Mundial de Oración por la Iglesia en China, orando por la unidad y la evangelización en China. Después de la oración mariana del Regina Coeli del Domingo de Pentecostés, 23 de mayo, el Santo Padre recordó la Jornada con estas palabras: “La memoria litúrgica de la Santísima Virgen María, Auxilio de los cristianos, nos da - mañana 24 de mayo - la oportunidad de celebrar la Jornada de Oración por la Iglesia en China. Mientras los fieles en China están rezando para que la unidad entre ellos y con la Iglesia universal sea cada vez más profunda, los católicos del mundo entero - especialmente los que son de origen chino - se unen a ellos en la oración y en la caridad, que el Espíritu Santo derrama en nuestros corazones, sobre todo en esta solemnidad”.
Según la información recibida en la Agencia Fides, veintiún fieles de la parroquia de Ping Du de la diócesis de Qing Dao, han realizado una peregrinación en las parroquias cercanas guiados por su párroco, para vivir y orar juntos por la unidad y la comunión, invocando la gracia del Espíritu Santo y siguiendo las indicaciones del Papa Benedicto XVI. Han compartido su testimonio de fe, “porque el soplo del Espíritu Santo se derrame sobre todos y su fuego permanezca siempre en los corazones de los fieles”.
Cientos de fieles de la parroquia de Wu Qiang, de la diócesis de Heng Shui de la provincia de He Bei han ido en peregrinación al Santuario mariano de Shan Jian, en el distrito de Ping Yin de la provincia de Shan Dong. Después del Vía Crucis, la Celebración Eucarística y las visitas a las “parroquias hermanas”, han rezado juntos para que todos puedan vivir intensamente la unidad recomendada por el Papa y han consagrado toda la Iglesia en China al Sagrado Corazón de Jesús
La parroquia de Lin Zhang en la diócesis de Han Dan, ha sido consagrada solemnemente en el Monte Santo de Nuestra Señora de China. El Obispo diocesano ha invitado a todos a “confiar siempre en al Virgen, imitándola, para convertirse en buenos misioneros católicos”. (NZ) (Agencia Fides 27/05/2010)
