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Bagdad (Agencia Fides) - Amargura y dolor, pero también palabras de esperanza y perdón figuran en el acorado llamamiento confiado a Fides de S. Em. el Cardenal Emmanuel Delly, Patriarca Caldeo de Bagdad, tras el atentado que sufrieron el pasado 2 de mayo tres autobuses de jóvenes estudiantes cristianos de viaje a Mosul.
Estas son las palabras del Patriarca a la Agencia Fides:
“Hoy con lágrimas en los ojos, estamos conmocionados por el atentado que han sufrido estos jóvenes cristianos inocentes: dos explosiones en un brutal acto de violencia, que sólo por gracia de Dios no se ha convertido en una masacre mucho más grande. Estamos muy cerca de las familias de las víctimas, expresamos las más sinceras condolencias a quienes han perdido a sus seres queridos. Rogamos por el eterno descanso de sus almas y oramos por los heridos, muchos de los cuales están en graves condiciones, y por el consuelo de sus familiares. Nuestra respuesta hoy es la de la oración y el perdón. Todos somos hermanos e hijos de Dios y el pueblo de Irak está llamado a hacer propia esta verdad.
Oramos para que el Señor ilumine las mentes y los corazones de nuestros gobernantes y de cuantos se manchan de esta violencia, para que puedan convertirse a la paz y la reconciliación. Nuestra respuesta cristiana a la violencia que experimentamos todos los días es y será siempre esta, en la certeza que el Señor está cerca de nosotros y se manifiesta en la proximidad, afecto, y en la ayuda que nos muestran todos los cristianos del mundo”. (PA) (Agencia Fides 4/5/2010)
