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Bao Tou (Agencia Fides) – Aplicar la Caridad, realizar el mandamiento del Señor y vivir la solidaridad recíproca: estas son las recomendaciones de los sacerdotes de la parroquia de Qing Shan de la diócesis de Bao Tou, en Mongolia, para los fieles por la Cuaresma. El párroco y su vicario, junto con los seminaristas, están acompañando intensamente el camino cuaresmal de sus fieles con el compartir espiritual y realizando gestos de caridad concreta, como la visita a los enfermos del hospital, a los ancianos de la Casa de los Ancianos y a quienes viven solos, llevando además del calor de la presencia y solidaridad, los sacramentos, copias de la Sagrada Escritura y libros religiosos para leer.
Según las informaciones recogidas por Fides, a través de estas visitas han conquistado también han conquistado a los paramédicos del hospital que se han dicho dispuestos a devolver la visita yendo a encontrarse con el párroco y los fieles en la iglesia, pues según ellos “son la única comunidad religiosa que se ocupa del alma de los pacientes, tras treinta años de la apertura del hospital”. Al mismo tiempo, los sacerdotes han dicho a los fieles que “estos gestos de caridad no deben limitarse solo a la Cuaresma, sino que deben proseguir durante toda nuestra existencia cristiana”.
La diócesis de Bao Tou recibió el Evangelio durante la dinastía Yuan (1271 - 1368) y la comunidad cristiana tuvo un gran desarrollo en el siglo XIX gracias al empeño de los Misioneros de Scheut (CICM). Hoy la diócesis cuenta con más de 30 mil fieles con decenas de sacerdotes y religiosas de la Congregación diocesana de las Siervas del Corazón Inmaculado de María, 13 parroquias y 5 estaciones misioneras. (NZ) (Agencia Fides 27/03/2010; líneas 21, palabras 305)
