ASIA/PAKISTÁN - Para la Iglesia “el gobierno está en letargo mientras talibanes eliminan a las minorías religiosas”

viernes, 26 febrero 2010

Lahore (Agencia Fides) – Profunda indignación de la Iglesia católica en Pakistán por las condiciones de las minorías religiosas, expuestas a presiones de talibanes: El Arzobispo Lawrence Saldanha, Presidente de la Conferencia Episcopal, firmó y envió a Agencia Fides un comunicado de la “Comisión Justicia y Paz” en el que se condena “el letargo del gobierno” que deja en libertad a los talibanes “alentándolos así a la imposición de la jazia (el impuesto islámico exigido a los no musulmanes) por parte de militantes integralistas”, así como “secuestros para extorsionar, asesinatos y el fenómeno de los prófugos internos”, que las minorías religiosas no musulmanas sufren en provincias como Punjab, Sindh, Provincia de la Frontera de Noroeste y Baluchistan.
La Iglesia intervino tras las violencias que afectaron las comunidades sikh (ver Fides 25/2/2010), y que involucran ampliamente a cristianos e hindúes: “se trata de violencias, crímenes y graves amenazas contra la libertad y derechos de propiedad, contra minorías religiosas”, explica a Fides el Arzobispo. “Lo que ha sucedido contra los sikh no son episodios aislados de violencia, sino frecuentes ataques a los creyentes no musulmanes. Los gobiernos locales de la provincia y el gobierno federal de Pakistán deberían tratar estos incidentes como indicadores de una alarma y adoptar medidas para prevenirlos, asegurando la legalidad y el pleno control de la situación”, afirma el Arzobispo.
Si en la provincia de la Frontera de Noroeste el blanco preferido por los talibanes son los sikh, “en las provincias de Sindh y Baluchistas cientos de creyentes hindúes han perdido propiedades y también la vida”, dice el Arzobispo, recordando también ataques contra cristianos en el valle de Swat y en muchas otras áreas.
“La Iglesia Católica pide que la protección de las minorías se convierta en una prioridad en la agenda del gobierno”, ya que dichos grupos son los más expuestos a la violencia organizada. Por ello, concluye el Arzobispo “es necesario actuar para tutelar la seguridad, eliminando también las leyes discriminatorias” existentes, como es la ley sobre la blasfemia, “para promover la tolerancia y la armonía social en Pakistán”. (PA) (Agencia Fides 26/02/2010)


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