AMERICA/BRASIL - Mensaje del Santo Padre en la conclusión de las celebraciones del centenario de la Arquidiócesis de Sao Paulo: “Que esta significativa celebración anime a todas las fuerzas vivas de esta Iglesia local a un marcado protagonismo evangelizador”

lunes, 9 junio 2008

Sao Paolo (Agencia Fides) - El estadio Pacaembu en la Arquidiócesis de Sao Paulo (Brasil) vibró de alegría y fervor el domingo 8 de junio. La afluencia de fieles supero superó las expectativas, según ha afirmado uno de los coordinadores de las conmemoraciones, calculándose en casi 40 mil las personas que se reunieron para conmemorar una fecha memorable para la Iglesia local: la clausura del año dedicado al centenario de la Arquidiócesis de Sao Paolo.
El evento comenzó con varias representaciones musicales de reconocidos cantores católicos. En la apertura, Mons. Pedro Luis Stringhini leyó el Mensaje que ha enviado el Santo Padre, Benedicto XVI, con motivo del centenario, con el que se asocia al "jubiloso canto de acción de gracias al Señor por los frutos de vida cristiana con los cuales quiso bendecir a esta querida Iglesia local". El Papa hizo referencia en su Mensaje a su visita a San Pablo el año pasado, de la cual guarda aún vivos recuerdos: "conservo con particular alegría en la memoria los instantes que la Providencia me concedió al presenciar en aquella verdadera fiesta espiritual que fue el encuentro con la juventud latinoamericana del año pasado".
Recuerda también el Santo Padre el acto de entronización del Apóstol Pablo como Patrono de la Arquidiócesis como “una feliz circunstancia destinada a valorar aún más el Año Paulino para que de, si Dios quiere, frutos abundantes en la comunidad eclesial”. Concluye el Papa su Mensaje elevando a Dios su oración para que “esta significativa celebración anime a todas las fuerzas vivas de esta Iglesia local a un marcado protagonismo evangelizador, a la proclamación asidua de la Palabra de Dios a través del impulso apostólico de todos, a un esfuerzo inteligente y generoso por defender la familia y la vida de todo ser humano” mientras imparte a todos una especial Bendición Apostólica.
El Cardenal Odilo Pedro Scherer, Arzobispo de San Pablo, saludó a los presentes y recordó a todos los Obispos y Arzobispos que le han precedido en el gobierno de la arquidiócesis. "Hoy queremos agradecer a Dios –ha afirmado - por la historia de nuestra arquidiócesis. Toda la comunidad Archidiocesana es invitada a testimoniar que Dios habita esta ciudad y que esto es bueno y beneficia a San Pablo". Después de la entrada solemne de la estatua de San Pablo Apóstol, se dio lectura al decreto de la Congregación para el Culto Divino que "designa el Apóstol San Pablo como Patrono junto a Dios de la Arquidiócesis de San Pablo, en Brasil".
El acto principal fue la solemne misa presidida por el Nuncio Apostólico en Brasil, Monseñor Lorenzo Baldisseri, junto por el Cardenal Odilo Scherer, numerosos arzobispos y obispos y centenares de sacerdotes de distintos lugares del Brasil. Estuvieron presentes numerosas autoridades civiles y militares, como también personalidades de destaque de otras religiones y confesiones cristianas. La limosna recolectada durante la misa, según informó Mons. Joaquim Justino Carreira, Obispo auxiliar de San Pablo, será destinada a financiar la construcción del Santuario Madre Paulina, en la favela Heliópolis, una de las mayores de América Latina. En su homilía, el Nuncio Apostólico, Mons. Lorenzo Baldisseri hizo referencia al coraje y ardor evangelizador del Apóstol San Pablo, como fruto de su conversión y encuentro personal con Cristo, que marcaron su vida. A continuación dijo "a partir de hoy esta arquidiócesis tiene oficialmente como patrono a San Pablo, de manera que al igual que el apóstol gigante, esta ciudad de tanta importancia y gravitación en el contexto latinoamericano en el ámbito social, político y económico, debe ser un ejemplo de ardor e irradiación apostólicos para todo este continente. Sin duda está llamada a tornarse en una Iglesia en estado de misión como nos lo pidiera la V Conferencia de Aparecida"
Finalmente, la estatua de San Pablo Apóstol fue llevada triunfalmente en procesión, alrededor del estadio, siguiendo posteriormente hacia la Catedral, en el centro de la ciudad. (RG) (Agencia Fides 9/6/2008)


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