Pekín (Agencia Fides) – Ha comenzado una nueva etapa en el camino vocacional de los seminaristas en distintas diócesis de China, desde Pekín y Shanghái hasta Hebei, Shaanxi y Jilin.
El 6 de septiembre se inauguraron oficialmente los cursos 2025/2026 en el Seminario de Sheshan, en la diócesis de Shanghái, donde fueron admitidos 15 nuevos seminaristas y 12 religiosas, que seguirán un programa de formación específico. En su intervención, el obispo de Shanghái y rector del seminario, Joseph Shen Bin, recordó los frutos del último año y subrayó tres cualidades esenciales para quienes inician este camino: fe firme, mente clara y castidad. Asimismo, exhortó a ampliar los horizontes culturales aprovechando la riqueza de la tradición china, para dar un testimonio más vivo del Evangelio, e invitó a cultivar la oración, observar los mandamientos, servir la misión confiada por el Señor y vivir en comunión con todos.
El vicerrector, padre Fang Buke, destacó que desde su fundación el seminario de Sheshan ha mantenido una doble misión: formar buenos pastores para la Iglesia y preparar testigos capaces de llevar la luz del Evangelio a todos. Recordó además a los seminaristas la importancia de la formación espiritual, el cumplimiento de las reglas y la comunión fraterna, para ser miembros vivos del «Cuerpo místico de Cristo» manifestando la caridad en China.
En Pekín, el Seminario diocesano fue el primero en abrir el curso, el 5 de septiembre, en presencia del obispo Giuseppe Li Shan y del obispo coadjutor Matteo Zhen Xuebin. En su homilía, Li Shan centró su reflexión en los siete dones del Espíritu Santo -sabiduría, inteligencia, consejo, fortaleza, ciencia, piedad y temor de Dios- animando a los seminaristas a invocarlos con confianza en su camino vocacional.
El 9 de septiembre, en la inauguración del Seminario Nacional, el mismo obispo reiteró que los seminarios son el «corazón» de la Iglesia en China, llamados a formar a los futuros responsables de las comunidades católicas. «Solo manteniendo sano y vital este corazón la misión de la Iglesia dará frutos fecundos», afirmó, alentando a los seminaristas a cultivar su vocación con oración y estudio constante al servicio de toda la Iglesia en el país.
(NZ) (Agencia Fides 16/9/2025)