ASIA/CHINA - Las comunidades católicas chinas continúan su camino durante el mes mariano, entre "Virgencitas peregrinas" y la ordenación de nuevos sacerdotes

Pekín (Agencia Fides) - Las estatuas de la Virgen, después de la bendición en el Santuario, " han salido " para llegar a todos los decanatos de la provincia de Jiangxi. Lo han llamado "el método de la Visitación", recordando el relato evangélico de la visita de la Virgen María a su prima Isabel. Es la iniciativa que ha partido este año del Santuario de Nuestra Señora de Lushan, signo del fervor con que la espiritualidad popular de los católicos de esa región china vive también la devoción a María en el mes de mayo, a ella dedicado. Las estatuas de Nuestra Señora, una vez que hayan llegado a los distintos decanatos, acompañarán las liturgias, los rezos comunitarios del Rosario, los momentos de oración compartidos por las familias de las aldeas a lo largo del mes mariano. “La devoción a María, que se expresa precisamente en esta 'peregrinación' de estatuas -ha dicho el sacerdote que ha celebrado la liturgia de apertura del mes mariano-, sostiene y conforta nuestra fe en Jesús”.
En los primeros días de mayo, en varias provincias de China continental, desde Hainan hasta Mongolia Interior, las liturgias y los momentos de oración comunitaria de carácter mariano se han entrelazado con las solemnes celebraciones de ordenación de nuevos sacerdotes y diáconos.
El miércoles 3 de mayo, en la fiesta de los santos apóstoles Felipe y Santiago el Menor, Joseph Gan Junqiu, arzobispo de Guangzhou -la metrópoli del sur de China continental- ha presidido la ordenación del padre Hou Pengfei, en la isla de Hainan. La comunidad católica de Hainan presenta unas características muy singulares. Hasta hace 11 años, cuando se ordenó allí el primer sacerdote de los últimos 60 años, sólo había una iglesia y únicamente una religiosa se dedicaba a la labor pastoral. Hoy, Hainan cuenta con más de 5.000 católicos bautizados, en su mayoría trabajadores inmigrantes internos pertenecientes a grupos étnicos minoritarios, y hay ocho iglesias en la isla. Los turistas son los principales destinatarios del anuncio del Evangelio. Como ha señalado el obispo Gan “Hainan representa la situación típica de las palabras de Jesús, cuando dijo que 'la mies es mucha, pero los obreros pocos'. Debemos dar gracias al Señor por el don de un nuevo sacerdote”.
Esta misma situación la han vivido los católicos de las estepas septentrionales de Mongolia Interior. También en esa provincia ha sido ordenado un nuevo diácono, llamado a servir a la Iglesia local con celo misionero. Mientras que la diócesis de Linyi (provincia de Shandong) cuenta ya con dos nuevos sacerdotes ordenados durante la solemne celebración del miércoles 3 de mayo presidida por monseñor John Fang Xingyao, a la que asistieron más de mil fieles. Por otra parte, Paul Meng Ningyou, arzobispo de Taiyuan (capital de la provincia de Shanxi), ha ordenado cinco nuevos sacerdotes y un diácono de la diócesis de Jinzhong. A la concelebración, que ha presidido, han asistido 120 sacerdotes. El arzobispo Meng presidirá también las ordenaciones sacerdotales en su archidiócesis de Taiyuan el 13 de mayo, fiesta de Nuestra Señora de Fátima.
(NZ) (Agencia Fides /05/2023)

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