EUROPA/ALEMANIA - El Presidente de las OMP: “Incluso desde nuestros escritorios podemos ser misioneros”

miércoles, 17 octubre 2018 animación misionera   obras misionales pontificias   iglesias locales  

Aachen (Agencia Fides) - Con motivo de su visita a Missio-Aachen (ver Fides 16/10/2018), el arzobispo Giovanni Pietro Dal Toso, Presidente de las Obras Misionales Pontificias (POM), presidió una misa esta mañana de 17 de octubre en la sede de Missio a la que asistieron quienes trabajan en sus oficinas y en las de la Infancia Misionera Alemana (Kindermissionswerk 'Die Sternsinger').

“Es importante que sigamos repensando el propósito de nuestro compromiso, que continuemos recordando que Dios es el comienzo y la meta de nuestras acciones y de nuestra existencia”, enfatizó el obispo Dal Toso al comienzo de su homilía. “Es Él quien nos da la fuerza para comprometer nuestra vida de acuerdo con su voluntad en beneficio de nuestro prójimo. En este sentido, me gustaría agradecerles por el trabajo de Missio y de la Infancia Misionera alemana”, destacó.

Al recordar la fiesta de San Ignacio de Antioquía, que se celebra hoy, el arzobispo se refirió a su viaje a Siria y a la difícil situación de los “hermanos y hermanas de Oriente Medio”, y destacó: “mi primer encuentro real con la Missio Aachen está relacionado con las dificultades de nuestros hermanos cristianos en Siria e Irak, y me gustaría mencionar vuestra generosidad también con respecto a esta preocupación”.

“La característica específica de Missio y, en principio, de nuestras Obras Misionales Pontificias, es el apoyo a la actividad pastoral de la Iglesia”, destacó el Presidente de las Obras Misionales Pontificias. “La Iglesia existe porque Jesús nos ha enviado a todo el mundo para proclamar el Evangelio. No se trata estrictamente de la Iglesia como tal, sino del hecho de que a través de la presencia de la Iglesia y la proclamación del Evangelio, el ser humano recibe el Espíritu de Dios, que hace que la tierra sea nueva, como cada uno de nosotros”. “Tenemos el gran privilegio de participar en esta actividad”, concluyó el arzobispo Dal Toso que añadió: “incluso desde nuestros escritorios podemos ser misioneros para que cada persona pueda escuchar una palabra de consuelo, sanación, reconciliación, experiencia de unidad interior y libertad a través del encuentro con el Dios de Jesucristo”.
(MS/SL) (Agencia Fides 17/10/2018)


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