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Concordia (Agencia Fides) - Su Exc. Mons. Luis Armando Collazuol, obispo de Concordia (Argentina), participó en las negociaciones que el gobernador Sergio Urribarri mantuvo con los policías auto-acuartelados para pedir mejoras salariales (véase Fides 5/12/2013) dejando los centros habitados en manos de vándalos y saqueadores. El obispo ha revelado que su intervención siempre ha mirado a “ayudar a que las partes puedan dialogar”, después, en una nota enviada a la Agencia Fides, precisa: “ahora queda otra tarea, ir sanando las heridas que quedan en la población”.
En la nota el Obispos de Concordia cuenta como ha vivido estas horas críticas: por una parte la protesta de la policía y por otra robos y saqueos: “la jornada de ayer (lunes 9) la viví con mucha tristeza, fue tensa en la ciudad, donde por un lado teníamos los saqueos del día anterior, los hechos de violencia, los vecinos que se armaban, y al mismo tiempo el tema de la policía que estaba auto-acuartelada haciendo reclamos”. El obispo subraya que “el servicio de los agentes de la policía tiene que ser justamente remunerado pero al mismo tiempo tenemos la preocupación que la forma del reclamo no puede dejar sin protección a la sociedad”.
Mons. Collazuol había encontrado a los sacerdotes de la diócesis de Concordia para ver “cómo acompañar a la sociedad en esta situación difícil” y de aquí nació la propuesta de ofrecer una especie de presencia “para ayudar a las partes al diálogo, de forma que se crease un diálogo sereno, sincero, pero siempre a través de las vías institucionales”.
Concluyendo su narración, el Obispo subraya que “ahora queda otra tarea, ir sanando las heridas que quedan en la población” y a este respecto recordó: “la desconfianza entre vecinos, el miedo social; ¿que podemos decir a los chicos que vieron a sus padres que fueron a saquear?” y añade “necesitamos educar bien para fortalecer los valores”.
Como había afirmado el obispo de Jujuy (véase Fides 10/12/2013), también Mons. Collazuol subraya: “si bien hay necesidades insatisfechas en la comunidad, los saqueos no fueron por hambre, no se robaban alimentos sino electrodomésticos”. (CE) (Agencia Fides, 11/12/2013)
