AFRICA/TUNEZ - El asesino del padre Marek Rybinski condenado

martes, 8 enero 2013

Túnez (Agencia Fides) – Las autoridades judiciales de Túnez han condenado a cadena perpetua a Chokri Ben Mustapha Bel Sadek Mesteri, carpintero, de 45 años, acusado del asesinato del salesiano polaco don Marek Rybinski. El religoso fue encontrado muerto el 18 de febrero de 2011 en un depósito de la escuela salesiana de Manouba (véase Fides 19/2/2011). La sentencia fue anunciada el viernes pasado. Los tiempos requeridos para el proceso se ha alargado debido a que en los últimos meses, la estrategia de defensa sugerida por sus abogados, el condenado había intentado retractarse de la admisión de culpabilidad realizada precedentemente, hablando de confesiones obtenidas bajo presión.
El padre Marek Rybinski fue asesinado por una simple cuestión de dinero. El asesino le había pedido un préstamo de dos mil dinares tunecinos (unos mil euros) para comprar el equipo para un trabajo que le habían encargado. Luego se había gastado el dinero para otras cosas. EL padre Marek había pedido que le devolviese el dinero de la escuela. Entonces, el carpintero atacó al sacerdote golpeándole repetidamente con un objeto contundente en la cabeza y el cuello.
Precisamente en aquellos días, el éxito de la llamada “Revolución de los Jazmines” era todavía incierta y Túnez continuaba a ser sacudida por las protestas y los enfrentamientos entre la policía y los manifestantes. En ese clima el bárbaro asesinato del sacerdote polaco había alimentado las preocupaciones sobre el destino de los cristianos en el mundo árabe, donde el viejo equilibrio empezaba a tambalearse.
En una carta escrita en aquellos días, el Obispo de Túnez Maroun Lahham (hoy Vicario patriarcal para Jordania del Patriarcado Latino de Jerusalén) había recordado las frases que el padre Marek había escrito en un libro que acaba de publicar, dedicado a Túnez: «Durante la estancia en Túnez, mi actitud hacia mis hermanos musulmanes ha cambiado mucho. Este miedo al terrorismo y al extremismo ha desaparecido por completo. Los tunecinos son muy acogedores, amables y cordiales. Me enseñan esta actitud». (GV) (Agencia Fides 8/1/2013).


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