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Kinshasa (Agencia Fides) - "¿Qué pasará ahora? El riesgo es el impedimento, con las maneras fuertes, la manifestación de mañana en el Estadio de los Mártires, el riesgo son más muertos, se añadirá a decenas de muertos durante las últimas semanas por el ejército y la policía. El riesgo es que el país entero está en llamas". Es el dramático llamado lanzado por la "Red para la Paz del Congo", enviado a la Agencia Fides. A partir del 20 de diciembre de 2011, Joseph Kabila juró su cargo como jefe de Estado, la República Democrática del Congo vive una tensa espera por el anunciado juramento como jefe de Estado, de Etienne Tshsekedi, previsto para mañana, viernes 23 de diciembre, en el Estadio de los Mártires de Kinshasa. Tshsekedi se autoproclamó presidente después de rechazar los resultados electorales del 28 de noviembre presentados por la Comisión Electoral Independiente y validada por la Corte Suprema de Justicia.
"Después de la votación, Tshisekedi no hizo discursos incitando a la violencia, pero se ha negado a apelar a la Corte, considerada pro-Kabila, en su pretensión de declarar la victoria y proceder en consecuencia, no hay diálogo con el adversario. La UDPS, su partido, propuso las manifestaciones pacíficas en el país. ¿Lo serán realmente? ¿Cómo será el antagonista, que dirige las fuerzas armadas a menudo sin escrúpulos? ¿Qué pasará con la gente? Tal vez será el final de la hierba pisoteada por los dos elefantes que luchan? ", escriben los misioneros de la" Red Paz para el Congo ".
"No existe una figura carismática en el país como Martin Luther King, que movilice y eduque en una lucha no violenta. Hay mucho en el sentido de haber llegado al límite de la resistencia, que puede llevar a tomar decisiones radicales ", advierte el texto.
A esto se suma "un movimiento autodenominado de resistencia a la ocupación del este del país que lanza sus proclamas invitando a la movilización general y armada, para terminar de una vez con la ocupación del país por Ruanda y Uganda y sus patrocinadores en Estados Unidos y Europa, y la expropiación de su riqueza".
Pero el camino de la violencia, advierten los misioneros, "la gente de Oriente cuenta con evidencia suficiente para que el país está sufriendo la destrucción masiva y la pérdidas. En la lucha armada, los más puros ideales por lo general son corruptos, por lo que con el tiempo la población se ve excluida de todos los lados. Pero lo que puede dar lugar a una nueva mano de obra de las matanzas es la condición de pobreza y el desempleo que afrontan la mayoría de los jóvenes".
Para superar esta situación, la "Red para la Paz del Congo", propone: presionar a Kabila, para que no recurra a la violencia, pedir a los dos contendientes y a las fuerzas políticas a aliarse con ellos en el diálogo, en un esfuerzo por aclarar las cosas y por el bien del país; la revisión de los datos electorales, a cargo de una comisión internacional de verificación, aceptada por ambas partes, con una fecha precisa; la vigilancia precisa en relación con el recuento de las leyes electorales, "puesto que ya se denuncia un fraude de gran envergadura"; y cualquier reparto del poder entre Kabila y los miembros del partido Tshsekedi. (L.M.) (Agencia Fides 22/12/2011)
