AFRICA/COSTA DE MARFIL - Hay decenas de miles de desplazados en el oeste del País: el Obispo de Man lanza un apelo através de Fides

sábado, 12 marzo 2011

Abidjan (Agencia Fides) - En Man (al oeste de la Costa de Marfil), las infraestructuras sociales y económicas, que ya estaban convalecientes desde 2002, están sufriendo un daño enorme a causa de la violencia que ha estallado por la crisis política derivada de la negativa del presidente en salida, Laurent Gbagbo, a reconocer la victoria de Alassane Ouattara, en la votación presidencial del 28 de noviembre de 2010.
"En la diócesis de Man, a 586 km de Abidjan, la ciudad de Duékoué ha sido escenario de enfrentamientos entre diversos grupos étnicos en la semana del 3 al 8 de enero” dice a Fides Su Exc. Mons. Gaspar Beby Gneba, Obispo de Man. "Los enfrentamientos han provocado diversos daños materiales, la pérdida de vidas humanas y ha creado numerosos movimientos migratorios internos y externos”.
En particular, explica Mons. Gneba, "sólo en Duékoué tres lugares han acogido desde el inicio a más de 30 mil personas desplazadas, de las cuales 15 mil en la Misión Católica de Santa Teresa, de los salesianos. En la actualidad, muchos desplazados han alcanzado a sus familiares en el sur del país, pero todavía hay más de 22 mil personas desplazadas en los centros de Duékoué”.
Según el Obispo, las otras localidades que acogen a las personas que huyen de la violencia son: Man, que después de la salida de varios desplazados hacia países vecinos (Guinea, Malí, Burkina Faso) acoge a 1.013 personas (606 mujeres y 407 hombres, de estos los niños menores de 5 años son 223); Danané, donde 3.800 personas se alojan en cuatro centros y con las familias del lugar; en las aldeas cerca de Danané, en la frontera con Liberia y Guinea, se encuentran otras tantas personas desplazadas; en los pueblos Cerca de Zouan Hounien y Bin Houyi (en la frontera con Liberia) hay 10.800 desplazados.
"Las medidas de emergencia están garantizadas por la Cáritas diocesana, con los pobres medios a su disposición, en colaboración con UNICEF y PAM. Sin embargo, el apoyo voluntario no es suficiente para poner en práctica toda la ayuda humanitaria necesaria", dice Mons. Gneba, que lanza un apelo principalmente por las 7.500 personas desplazadas en la Misión de Duékoué. (L.M.) (Agencia Fides 12/3/2011)


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