ÁFRICA - “El problema de los niños soldado se resuelve con el desarrollo, no con acuerdos declamadores”

viernes, 11 junio 2010

Roma (Agencia Fides)- “Los gobiernos africanos se deben empeñar en remover las condiciones que crean la rebeliones que llevan al reclutamiento de niños soldado y no limitarse a firmar acuerdos que parecen ser solo declamadores”, dice a Agencia Fides el P. Gerardo Caglioni, misionero javeriano con una larga experiencia en Sierra Leona, comentando la declaración firmada el 9 de junio en N’Djamena (Chad) para poner fin al reclutamiento de niños soldado.
La declaración de N’Djamena fue firmada por 6 de los 9 participantes en la conferencia regional sobre niños soldado, organizada por el gobierno del Chad y UNICEF, realizada en la capital del Chad del 7 al 9 de junio. Los Estados que firmaron son Camerón, Centroáfrica, Chad, Níger, Nigeria, Sudán. No firmaron el documento los otros tres participantes: República Democrática del Congo, Liberia y Sierra Leona. La declaración compromete a quiete firman “a ponerle un final a todo tipo de reclutamiento de niños en las fuerzas y grupos armados y garantizar que ningún joven de edad inferior a los 18 años participe, directa o indirectamente a las hostilidades”.
“Es inútil firmar acuerdos que terminarán siendo letra muerta si no se adoptan políticas concretas para dar una esperanza de vida a las jóvenes generaciones. Esto significa crear una verdadera política de desarrollo, una seria lucha a la corrupción, la creación de escuelas y de infraestructuras vitales para los países africanos. No pareciera que sea esta la voluntad”, dice P. Caglioni. “Si no se ofrece a los jóvenes la esperanza de una vida mejor nacerán nuevos grupos de guerrilla que reclutan quienes quieran, hasta niños. Por esto me mantengo escéptico frente a documentos que podrían terminar siendo solo declaraciones de intentos privados de efectos reales sobre la vida de las personas”.
“En Sierra Leona los niños soldado son usados por todos, no solo por los guerrillero del RUF (Revolutionary United Front) sino también por la milicias Kamajors, aliadas del gobierno. Después de la guerra (concluida en el 2002), se iniciaron programas para insertar a los niños soldado en la sociedad, dándoles escuelas y trabajo, pero nadie se ocupa de la víctimas de los niños soldados, que son a su vez niños. Estas personas han sufrido terribles violencias físicas y psicológicas. Conozco casos de violencias sexuales, de niños obligados a ver a sus padres ser asesinados y quemados, otros que han sufrido amputaciones. Las víctimas necesitan de asistencia material y psicológica pero son abandonadas totalmente a sí mismas”, concluye el misionero. (L.M.) (Agencia Fides 11/6/2010; líneas 30, palabras 426)


Compartir: