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Jerusalén (Agencia Fides) - Ante los enfrentamientos que han estallado de nuevo en Jerusalén, ante el conflicto que parece arrebatar la esperanza en Tierra Santa “nuestra respuesta es la oración, la invocación al Altísimo, que ablande los corazones, derrita el odio y haga brotar la paz” dicen a Fides las Madres Carmelitas Descalzas de Tierra Santa. Las religiosas tienen en Tierra Santa cuatro conventos de clausura en Jerusalén, Belén, Haifa y Nazaret, donde viven su carisma de “presencia oculta y orante, llamadas a comparecer ante Él, para orar y alabar al Señor”, dice a Fides Sor María Inés, Superiora del monasterio de Nazaret, que en 2010 celebra el primer centenario de su fundación.
“Vivimos nuestra fe en clausura pero, también en el escondimiento, llevamos en el corazón la situación de Tierra Santa y la Iglesia universal”, dice la Hermana María Inés a Fides. “En Tierra Santa desde hace años la población sufre. Nuestra oración se hace más intensa cuando la situación se vuelve más difícil. En estos momentos el Señor está presente. La oración es importante porque Dios toca los corazones de los hombres y puede ablandarlos. Nuestra vocación es la de interceder ante Dios para que vuelva la paz en Tierra Santa. Le pedimos que escuche el clamor de su pueblo, y rezamos para que los hombres escuchen la voz de Dios”.
Sor Anna Francesca, del Monasterio de Belén, es la coordinadora de la Asociación “Nuestra Señora del Carmelo en Tierra Santa”, que abarca las religiosos de los cuatro monasterios: “En Tierra Santa – explica a la Agencia Fides - todos oran: Judíos, musulmanes y cristianos, cada comunidad a su modo. La oración tiene siempre el poder de cambiar el corazón y es fuente de unidad. La oración no es inútil, sino que se hace más importante en tiempos difíciles. Si miramos el conflicto desde el punto de vista humano, se hace difícil encontrar una solución. Si se pone delante de Dios en la oración, ampliando el propio horizonte hacia lo alto, todo cambia, y los ojos se abren al amor”. “Gracias a la oración - concluye - todavía hay esperanza de paz y bondad para Tierra Santa”.
Las Carmelitas Descalzas de Tierra Santa son “un ejemplo de multiculturalidad” y viven “con grande madurez humana y espiritual” en la delicada situación de Tierra Santa, ha subrayado p. Javier Cannistra, Superior General de los Carmelitas Descalzos en una reciente visita a Oriente Medio. “La situación actual del conflicto entre el mundo árabe y el hebreo es el momento concreto que hoy estáis llamadas a asumir, viviéndolo en oración y transformando en ofrenda de amor todo lo que estáis llamadas a sufrir en comunión con los hombres y mujeres de estos países”, ha dicho en su mensaje dirigido a las religiosas, invitándolas a participar en la preparación del V centenario del nacimiento de Santa Teresa de Jesús (RG) (Agencia Fides 16/3/2010)
