Organo de informacion de las Obras Misionales Pontificias desde 1927
Hong Kong (Agenzia Fides) – “Prescindiendo de cualquier contexto social o cualquier tipo de formación recibida, es un deber para los sacerdotes el atender a los más débiles de la sociedad, tomando en serio sus problemas”. Así el P. Franco Mella, misionario del Pime, desde 1974 en servicio en Hong Kong, subrayó la dimensión social del sacerdocio. Según cuanto refiere Kong Ko Bao (el boletín diocesano en lengua china), el P. Mella, desde años involucrado en el campo de la justicia social, dijo a los periódicos católicos de Hong Kong que “a veces los fieles piensan que los sacerdotes deben ocuparse sólo de las cosas espirituales, pero la vida espiritual está estrechamente ligada a la vida temporal”. Continuando su discurso, el misionero explicó: “durante mi formación, los rectores tenían miedo que nosotros entrásemos demasiado en la vida social. Hoy, al contrario, los formadores de los seminarios temen que los seminaristas no se interesen lo suficiente en la vida social. Según mi opinión, prescindiendo del contexto o de la formación recibida, los sacerdotes deben tener en el corazón la dimensión social, porque hace parte del sacerdocio”. El Padre Mella, nacido en Italia en 1948, entró a los 18 años en el seminario del PIME. Ordenado sacerdote en 1974, fue mandado a Hong Kong en septiembre del mismo año. En los años 90 fue trasladado a la China continental, en la ciudad de Xu Zhou y Kai Feng, para trabajar como profesor. En estos últimos años intensificó su compromiso social junto a los pobres, los débiles y los más necesitados en la sociedad. (NZ) (Agencia Fides 08/03/2010 líneas 18, palabras 261)
