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Hong Kong (Agencia Fides) - Las personas que han elegido la vida consagrada debe ser un puente de comunión “con inteligencia, sabiduría y discreción”, además todo el mundo debe cuidar las vocaciones, “no sólo sacerdotales, sino también para la vida religiosa”: son las recomendaciones de Mons. John Tong, Obispo de la diócesis de Hong Kong, durante la celebración de la Jornada Mundial de la Vida Consagrada, celebrada el 2 de febrero en la parroquia de Cristo Rey, según cuanto informa Kong Ko Bao (la versión en chino del boletín diocesano), más de 400 sacerdotes, religiosos y religiosas, participaron en la solemne liturgia y de la Fiesta de la Presentación de Jesús en el Templo, renovando los votos de pobreza, castidad y obediencia. Al destacar la estrecha relación de los religiosos con la realidad diocesana, el Obispo ha recomendado a los presentes de dar la máxima atención a la formación de las vocaciones, a la pastoral de la Iglesia y a los inmigrantes fieles presentes en el territorio, sobre todo, se debe movilizar a todo el Grupo para la Promoción de las Vocaciones establecidos en cada parroquia. Por último, el Obispo Tong ha dicho que “ha visto con agrado la participación activa de los laicos en la vida de la Iglesia”, además “el papel de los sacerdotes y personas consagradas, es insustituible”. (NZ) (Agencia Fides 09/02/2010)
