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Roma (Agencia Fides) - “El 2010 y el 2011 son años decisivos para la historia de Sudán. Estoy seguro que hay esperanzas reales de paz ya que en los últimos meses se han dado algunos hechos positivos tanto en Sudán del Sur como en el Darfur” declara a la Agencia Fides S.E.R. Mons. Leo Boccardi, Nuncio Apostólico en Sudán y en Eritrea.
“No niego que aún hay dificultades por superar, las condiciones de inseguridad en las distintas zonas del país, la corrupción, los conflictos tribales, pero pienso que si el Comprehensive Peace Agreement (CPA) se aplica integralmente Sudán encontrará la paz” afirmó Mons. Boccardi. El CPA, firmado en Nairobi en el 2005, contempla la realización de elecciones en abril de este año para elegir al Presidente del país, al Parlamento y a los gobernadores. También en Sudán del Sur se realizarán elecciones (Presidente, gobernadores y Parlamento) que, en base al CPA, goza de una amplia autonomía. En el 2011 se realizaría un referéndum sobre la independencia de Sudán del Sur.
Según Mons. Boccardi también la situación en Darfur está mejorando. “No se ha dado la emergencia humanitaria que algunos temían cuando el gobierno de Khartoum expulsó a varias ONG occidentales de la región. Éstas han sido sustituidas por ONG árabes y se está produciendo un paulatino regreso de la población a sus pueblos”. “La etapa del conflicto militar parecería superada, como afirman también los dirigentes de la fuerza de paz conjunta ONU-Unión Africana. El conflicto se ha trasladado al plano político, con las negociaciones en Doha entre el gobierno de Khartoum y los representantes de los movimientos guerrilleros y de la sociedad civil del Darfur”. “Es verdad – precisa el Nuncio – que aún se vive un cierto grado de inseguridad, pero esto se debe no tanto a las acciones militares sino sobre todo a la presencia de bandidos, que han encontrado en el secuestro de operadores y de funcionarios occidentales una fuente de fácil ganancia”.
En lo que respecta a Sudán del Sur los enfrentamientos tribales y las incursiones del LRA (Ejército de Resistencia del Señor) son los factores que más alimentan la inseguridad en varias zonas. En particular uno se pregunta como es posible que el LRA pueda seguir activo después de 20 años. ¿Quién financia este movimiento? ¿Cómo es posible que el LRA haya logrado extender sus operaciones desde el norte de Uganda a Sudán del Sur, al este de la República Democrática del Congo y a la República Centroafricana, a pesar de la persecución que sufre?
A pesar de estas dificultades la Iglesia en Sudán del Sur continúa a crecer. “En Juba, capital de Sudán del Sur, se están consolidando las estructuras de la Iglesia en dicha zona. Se ha creado una universidad católica, se ha abierto el seminario mayor y el Secretariado católico, que había sido transferido a Nairobi, en Kenia, ha regresado a Juba” afirma Mons. Boccardi. “También en otras zonas se ve un fermento de la comunidad católica, en particular los jóvenes tienen muchas ganas de participar en la vida de la Iglesia. Pude participar en el encuentro de jóvenes de la diócesis de Rumbek, el 21-22 de diciembre. Participaron 1,500 jóvenes, y todo se realizó con la máxima seguridad. También en Khartoum la comunidad católica está activa, y los católicos no tienen mayores problemas para vivir su propia fe”.
“El mensaje lanzado por Benedicto XVI al final de la Segunda Asamblea Especial para África del Sínodo de los Obispos (“Iglesia en África, levántate y camina en solidariedad con la Iglesia Universal”) ha sido bien acogido por la Iglesia de Sudán y de Eritrea, que busca continuar con el propio trabajo de evangelización y de promoción humana, con las fuerzas y con la ayuda de la Iglesia Universal”, concluye Mons. Boccardi. (L.M.) (Agencia Fides 22/1/2010 – líneas: 43, palabras: 651)
