ÁFRICA/MALAWI - El regalo de Navidad para los niños de las montañas de Malawi: una escuela

Lilongwe (Agencia Fides) – Una Navidad de solidaridad para dar una esperanza a los niños y a los jóvenes que viven en las montañas de Malawi. Es el testimonio, enviado a la Agencia Fides por el p. Piergiorgio Gamba, misionero montfortiano que desde hace unos treinta años trabaja en el país.
“En las montañas viven unas diez mil personas, todos musulmanes, que hablan la lengua Chiyao. Son veintiún poblados que dan hacia la palude del Chirwa, donde hay miles de niños que te acogen con sus grandes sonrisas y la alegría de tenerte con ellos. Este es el límite desde donde, lamentablemente, una vez crecidos, los jóvenes del Chaone quieren solamente escapar, porque lo consideran una prisión. No hay corriente eléctrica, no hay dispensario de medicinas. ¿Cómo detener esta hemorragia que despuebla la montaña? ¿Cómo convencerlos de que abajo del valle no encontrarán lo que buscan si no descubren el secreto que ha llevado a sus antepasados a la montaña? Hemos encontrado a estos muchachos en tantos viajes que la misión nos hace recorrer para alcanzar a todos.
Con ellos hemos iniciado un largo camino. La montaña no es una maldición. Puede llegar a ser un inicio, una Navidad.
Comenzó así la construcción de una gran cabaña y pocas aulas, que son la escuela materna de la montaña. Desde estos bancos pueden ensanchar sus confines sin escapar
La construcción ha sido más lenta de lo previsto. Hemos tenido que esperar hasta el final de la lluvias para poder cocer los ladrillos. La arena misma ha sido difícil de excavar en la montaña. Hemos transportado sobre nuestros hombros todo el material hasta la cima: cemento, fierro, puertas y ventanas, porque en las montañas no hay un carpintero.
La ayuda de muchos ha permitido la realización de la escuela que de Navidad en Navidad, ayudará a los niños de la montaña a crecer. El 4 de enero de 2010 era la fecha prevista para la inauguración de la escuela materna de la montaña. Luego han bastado pocos minutos para destruir el sueño por tanto tiempo seguido. Inesperada y feroz, una tromba de aire ha golpeado directamente los poblados de la montaña.
Afortunadamente los heridos han sido poquísimos, mientras la estructura ha sufrido gravemente. Nos encontramos de nuevo al comienzo. Faltan pocos días para la Navidad. Sabemos que no podemos defraudar la esperanza de que algo nuevo está por nacer.
El 4 de enero de 2010 la escuela debe darle espacio a los muchachitos y a las niñas que no podemos perder por la calle. Regresarían una vez más a pastorear ovejas y a hacer la fila en el molino. Lo que habíamos separado será usado para rehacer lo que ha sido destruido. Necesitaremos las bancas y las sillas, el material escolar y sobre todo la posibilidad de preparar una comida al día.
Es esta la ayuda que pedimos a la generosidad de quien quiera ayudar a la Navidad de la montaña de Chaone. De parte de todos los misioneros y los voluntarios de Malawi. Gracias por el regalo de la Navidad”. (L.M.) (Agencia Fides 21/12/2009; líneas 35 palabras 509)