Ciudad del Vaticano (Agencia Fides) - En las parábolas «podemos reconocer la forma de comunicarse de Jesús, que tiene mucho que enseñarnos para el anuncio del Evangelio hoy». Con estas palabras, el Papa León XIV se ha dirigido a los fieles congregados en la plaza de San Pedro, durante su primera audiencia general de los miércoles, celebrada en el atrio de la basílica vaticana bajo un cielo amenazante de lluvia.
Después de saludar desde el papamóvil a los 40.000 peregrinos llegados de todo el mundo, el Pontífice ha continuado el ciclo de catequesis iniciado por el Papa Francisco con motivo del Año Santo, centrado en releer la vida de Jesús a la luz de los temas jubilares. En esta ocasión, ha retomado la parábola del sembrador, definiéndola como «una especie de introducción a todas las parábolas».
Cada parábola, ha explicado el Papa, «cuenta una historia tomada de la vida cotidiana, pero quiere decirnos algo más, nos remite a un significado más profundo. La parábola suscita en nosotros interrogantes, nos invita a no quedarnos en las apariencias».
La parábola del sembrador, en particular, «habla precisamente de la dinámica de la palabra de Dios y de los efectos que produce. De hecho, cada palabra del Evangelio es como una semilla que se arroja al terreno de nuestra vida». La imagen de la semilla, ha añadido, es recurrente en los Evangelios, aunque con significados distintos.
En el capítulo 13 del Evangelio según san Mateo, esta parábola abre una serie de otras pequeñas historias que también hablan de lo que ocurre en la tierra, símbolo del corazón humano, pero también del mundo, de la comunidad, de la Iglesia ha continuado explicando el Papa. «La palabra de Dios, de hecho, fecunda y provoca toda realidad», ha subrayado.
Esta Palabra de Jesús «es para todos, pero actúa en cada uno de manera diferente». Como el sembrador del relato evangélico, Dios «no se preocupa de dónde cae la semilla. La arroja incluso donde es improbable que dé fruto: en el camino, entre las piedras, entre los espinos. Esta actitud sorprende a los oyentes y los lleva a preguntarse: ¿por qué?» continúa.
«Estamos acostumbrados a calcular las cosas -y a veces es necesario-, ¡pero esto no vale en el amor! La forma en que este sembrador ‘derrochador’ arroja la semilla es una imagen de la forma en que Dios nos ama», ha afirmado el Papa. Aunque el destino de la semilla dependa también de la tierra y de sus condiciones, lo esencial del mensaje es que «Dios arroja la semilla de su palabra sobre todo tipo de terreno, es decir, en cualquier situación en la que nos encontremos».
Aunque a veces las personas seamos superficiales o distraídas, «Dios confía y espera que tarde o temprano la semilla florezca. Él nos ama así: no espera a que seamos el mejor terreno, siempre nos da generosamente su palabra». De ahí, ha añadido el Santo Padre, puede nacer en nosotros el deseo de ser un “terreno mejor”, sostenido por «la esperanza, fundada sobre la roca de la generosidad y la misericordia de Dios».
«Esta parábola nos dice que Dios está dispuesto a ‘desperdiciarse’ por nosotros y que Jesús está dispuesto a morir para transformar nuestra vida». A este respecto, el Papa ha evocado el cuadro El sembrador al atardecer, de Vincent van Gogh: «me llama la atención que, detrás del sembrador, Van Gogh haya representado el trigo ya maduro. Me parece una imagen de esperanza: de una forma u otra, la semilla ha dado fruto. No sabemos muy bien cómo, pero es así». En la obra, el sembrador aparece a un lado, mientras el sol domina el cuadro, «tal vez para recordarnos que es Dios quien mueve la historia, aunque a veces nos parezca ausente o lejano».
Al final de la audiencia, el Obispo de Roma ha lanzado un nuevo llamamiento por la paz en Oriente Medio: «La situación en la Franja de Gaza es cada vez más preocupante y dolorosa. Renuevo mi más sentido llamamiento para que se permita la entrada de una ayuda humanitaria digna y se ponga fin a las hostilidades, cuyo desgarrador precio están pagando los niños, los ancianos y los enfermos».
Por último, justo un mes después de la muerte de su predecesor, el Papa León XIV ha recordado con emoción al Papa Francisco: «No podemos terminar este encuentro nuestro sin recordar con mucha gratitud a nuestro amado Papa Francisco, que hace precisamente un mes regresó a la casa del Padre».
(F.B.) (Agencia Fides 21/5/2025)