VATICANO - Benedicto XVI a los chicos de la Acción Católica: " Dios se ha hecho hombre para enseñarnos el camino!; más aún, haciéndose niño, él mismo se ha hecho senda, también para vosotros”

Ciudad del Vaticano (Agencia Fides) - "Jesús es el camino que lleva a la vida auténtica, a la vida que nunca termina. Es un camino a menudo estrecho y empinado pero, si nos dejamos llevar por Él, es un camino maravilloso, como un sendero de montaña: cuanto más se sube, más se pueden admirar panoramas y vistas nuevos y vastos". El Santo Padre Benedicto XVI ha deseado a una delegación de chicos de la Acción Católica italiana a los que ha recibido en audiencia esta mañana con ocasión de las felicitaciones navideñas, caminar siempre con alegría por el camino de la vida con Jesús, que un día dijo: "Yo soy el camino” (Jn 14,6). El Papa no ha dejado de citar "la fatiga del camino", pero "lo importante es no extraviarse, no perder la senda, de otro modo ¡se corre el peligro de acabar en un barranco, de extraviarse en el bosque!".
Luego se ha dirigido a los chicos: " Dios se ha hecho hombre para enseñarnos el camino!; más aún, haciéndose niño, él mismo se ha hecho senda, también para vosotros: fue como vosotros, tuvo vuestros mismos años. Seguidlo con amor, manteniendo cada día vuestra mano en la suya. Esto que os digo a vosotros vale también para nosotros adultos. Deseo pues a toda la Acción Católica italiana que camine unida y a buen paso por la senda de Cristo, para testimoniar en la Iglesia y en la sociedad que es una senda hermosa; es verdad, exige dedicación, pero lleva a la alegría verdadera”.
Al inicio de su discurso, el Papa Benedicto XVI ha citado "el ejemplo luminoso" dejado por una niña, Antonia Meo, llamada Nennolina, de quien se ha decretado el reconocimiento de sus virtudes heroicas hace tres días. "Nennolina, niña romana, en su breve vida - sólo seis años y medio - demostró una fe, una esperanza, una caridad especiales, así como las otras virtudes cristianas - ha recordado el Pontífice -. Aun siendo una frágil niña, logró dar un testimonio fuerte y robusto de Evangelio y dejó un huella profunda en la Comunidad diocesana de Roma. Nennolina pertenecía a la Acción Católica: hoy indudablemente sería inscrita en el A.C.R.!... Su existencia, sencilla y al mismo tiempo importante, demuestra que la santidad es para todas las edades: para los niños y para los jóvenes, para los adultos y para los ancianos. Toda estación de nuestra existencia puede ser buena para decidirse a amar en serio a Jesús y para seguirlo fielmente". (S.L) (Agencia Fides 20/12/2007)