ASIA/PAKISTAN - Mientras el Presidente Musharraf reprime a la sociedad civil, preocupan los fenómenos de integrismo religioso en el país

vendredi, 9 novembre 2007

Islamabad (Agencia Fides) - Hay un distrito en el Pakistán septentrional, el del valle de Swat, en la Provincia de Frontera del Noroeste, que está en manos de grupos integristas islámicos de matriz talibana, y dónde la autoridad del estado ya no tiene ningún control. Aprovechando los desórdenes que se han sucedido tras el "golpe blanco" del general Pervez Mushrraf, centenares de combatientes islámicos han lanzado una ofensiva y han tomado el control de la mayor parte del distrito de Swat, denuncian a Fides fuentes católicas en Pakistán. Decenas de soldados y policías se han rendido y han entregado las armas a los combatiente integristas, antes de retirarse de la ciudad de Kalam, ha explicado un alto funcionario de la policía local. Aquí las minorías religiosas sufrirán ulteriores violencias y persecuciones (ver Fides 18/9/2007).
"Cuánto está ocurriendo es alarmante. Mientras el presidente reprime los legítimos movimientos de la sociedad civil, los grupos radicales islamistas tienen buen juego y se expanden". Los militantes han anunciado con orgullo su victoria sobre las fuerzas de la policía. "El gobierno debería dedicarse principalmente a frenar estos fermentos extremistas, antes que emplear sus energías en negar las libertades democráticas y derechos a las organizaciones de la sociedad civil", señala la fuente de Fides.
Mientras tanto, cuando los movimientos estudiantiles han salido a las calles en favor de los abogados y de los activistas detenidos , otra noticia ha revuelto el panorama político pakistaní: la líder de la oposición Benazir Bhutto ha sido sometida a arresto domiciliario en su vivienda en Islamabad, circundada por policías. Un funcionario de la policía ha precisado que la medida de detenciones domiciliarias fue tomada la víspera de la manifestación organizada por Bhutto en Rawalpindi, en los alrededores de Islamabad, para protestar contra la decisión del presidente Pervez Misharraf de imponer el estado de emergencia. El Partido Popular conducido por Bhutto ha referido el arresto de unos 5.000 de sus miembros en los últimos tres días en todo el país. Según los partidarios del Bhutto, "el gobierno tiene miedo de la popularidad de Benazir Bhutto y no quiere que la gente se pase a su bando". (PA) (Agencia Fides 9/11/2007 Línea: 28 Palabras: 374)


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