AFRICA/CONGO RD - “El M23 afirma dialogar mientras sigue blandiendo la amenaza de las armas”

sábado, 20 abril 2013

Kinshasa (Agencia Fides) - “El M23, está revelando, a quién lo quiera entender, su verdadero rostro”, afirma una nota enviada a la Agencia Fides por la Red Paz para el Congo. El M23 es el grupo armado responsable de graves crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad en Kivu del Norte, (al este de la República Democrática del Congo), que después de muchas vicisitudes, ha puesto en marcha una negociación difícil con las autoridades de Kinshasa.
Sin embargo, según la nota, mientras que el M23 “habla de diálogo y negociación”, al mismo tiempo, “va blandiendo la amenaza de las armas para recuperar el control de la ciudad de Goma y obligar por la fuerza, al gobierno congoleño a “negociar” y aceptar “sus condiciones”. El M23 obliga a la población civil a oponerse al despliegue de una fuerza adicional decidida por el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, para combatir y desarmar a los diferentes grupos armados, incluido el M23.
“Se trata de una estrategia bien estudiada: hacer que parezca que es la población la que se opone a este envío, cuando en realidad es el M23 quién teme la llegada de esta fuerza y que, por lo tanto, trata de evitarlo”, continúa la nota. “La población que ha decidido abandonar la aldea para no participar en la manifestación convocada por el M23, ha sido muy valiente, evitando entrar en la trampa de la complicidad”.
El actual jefe militar del M23, Sultani Makenga, ha desarmado a Bosco Ntaganda, su jefe militar hasta hace unas semanas, y lo ha hecho arrestar. “Con esta operación, el M23 quiere dar a entender que está colaborando con la justicia y que, por lo tanto, merece una recompensa: ser reconocido como un movimiento de paz y ser reintegrado plenamente en el ejército nacional y en las instituciones políticas congoleñas”, sostiene la nota.
“En realidad, no hay ninguna diferencia entre Bosco Ntaganda, con orden de captura por la Corte Penal Internacional y Sultani Makenga, expulsado del ejército congoleño y sujeto a sanciones por parte del Consejo de Seguridad de la ONU” concluye la nota. (L.M.) (Agencia Fides 20/4/2013)


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