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Bamako (Agencia Fides) - Es necesario abrir inmediatamente corredores humanitarios para permitir el envío de ayuda a la población que está sin alimentos ni medicinas. Este es el llamamiento lanzado por Su Exc. Mons. Jean Zerbo, Arzobispo de Bamako y Presidente de Cáritas Mali, a través de Caritas Internationalis. En una nota enviada a la Agencia Fides, el Arzobispo Zerbo dice, “ha comenzado un nuevo período de sufrimiento para el pueblo de Malí. Damos la bienvenida a cualquier contribución para ayudar al creciente número de personas desplazadas y refugiadas. Estas personas necesitan alimentos, agua potable, kits de higiene personal, medicamentos contra la malaria y otros materiales para satisfacer las necesidades básicas porque la situación está empeorando. Estamos en la temporada de frío y también hay humedad. Esto hace que la situación humanitaria sea aún más complicada”.
En la nota de Caritas Internationalis se estima que unas 400.000 personas han huido desde el norte de Malí y de las zonas de combate, para refugiarse en el sur o en países vecinos. “Las cifras exactas de las personas desplazadas y los refugiados son difíciles de determinar por qué las personas continúan moviéndose” dice a Fides don Edmond Dembele, Secretario General de la Conferencia Episcopal de Malí. “Cáritas Malí se está moviendo desde hace tiempo para ayudar, pero sus medios son limitados. A partir de abril de 2012 había donado varias toneladas de cereales y medicinas a las poblaciones del norte ocupado por los islamitas, así como se había activado para ayudar a las personas desplazadas en Bamako y otras ciudades del sur”, afirma don Dembele. “De hecho, como afirma Mons. Zerbo, la situación humanitaria que ya era dramática, ha empeorado en la última semana con el comienzo de la lucha. Se necesitan urgentemente las ayudas internacionales” concluye el sacerdote. (L.M.) (Agencia Fides 18/1/2013)
