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Juba (Agencia Fides) – Cada día en todo el mundo mueren 19.000 niños, y un tercio de estas muertes están relacionadas con la malnutrición. Hay países donde el problema del hambre es particularmente grave. Entre ellos, el más joven del mundo, Sudán del Sur, donde 200.000 niños están en riesgo. EN el hospital de la capital, Juba, cada día llegan niños que sufren de desnutrición aguda y que están bajos de peso para su edad. Es el único hospital pediátrico en el país.
Cada año, las organizaciones humanitarias tratan de ayudar a 70.000 niños, pero en el sur de Sudán están en riesgo más de 200.000. La situación es aún peor en las zonas rurales, donde los niños siguen muriendo a causa de las fiebres altas que llevan a la malaria. En el país hay 9 millones de personas, la mitad son menores.
Antes de obtener la independencia en 2011, tras varios años de conflicto con Sudán, fueron destruidas la mayor parte de las infraestructuras y una generación entera ha quedado huérfana. El gobierno, con el apoyo de las organizaciones internacionales, ha logrado reducir los índices de pobreza, pero aún hay mucho que hacer, empezando por el grupo más afectado, la infancia. (AP) (7/1/2013 Agencia Fides)
