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Zamboanga (Agencia Fides) – “El Ramadán es para todos una oportunidad para reflexionar, para encontrar el significado espiritual de la vida. Para el musulmán es algo obligatorio, para otros es un reto. El Movimiento 'Silsilah' siempre ha subrayado el aspecto espiritual de la vida. Esta es una oportunidad para reflexionar sobre la importancia de la espiritualidad en la vida-en-diálogo, y ayudar a los musulmanes y a los cristianos a hacer un tesoro de fe”: lo afirma un mensaje enviado a la Agencia Fides y difundido por el Movimiento para el Diálogo islámico-crisitiano 'Silsilah' durante el mes de Ramadán, que la comunidad islámica vive en el período comprendido entre el 20 de julio y el 18 de agosto.
El movimiento 'Silsilah' fue fundado en la isla meridional filipina de Mindanao, por el misionero del PIME (Pontificio Instituto de Misiones Extranjeras) p. Sebastiano D'Ambra, junto con algunos líderes musulmanes, y trabaja desde hace 25 años para la formación de los jóvenes y la armonía social y religiosa. Funciona en un contexto, el sur de Filipinas, de grandes tensiones, ya que la zona es el hogar de un importante componente islámico (alrededor de 6 millones de personas), que también han dado lugar a movimientos guerrilleros separatistas.
La obra del diálogo está bien desarrollada en Mindanao: según la información de la Agencia Fides, el “Consejo Interreligioso de Líderes” de Zamboanga, en una reciente reunión ha remarcado algunos elementos clave y los beneficios del mes del Ramadán: el énfasis en el espíritu de sacrificio, el arrepentimiento por los pecados, la comunión con Dios, el amor a Dios y al prójimo, la necesidad de dar tiempo para la meditación, el perdón y la caridad, la obligación del ayuno, la purificación espiritual, la virtud de la tolerancia hacia otras religiones. Estos valores, han acordado los líderes cristianos y musulmanes del Consejo, acercan a los creyentes de diferentes religiones. En vista de Ramadán, “los cristianos están invitados a comprender mejor la religión del Islam y a apreciar el camino espiritual de la comunidad musulmana”, subrayan. Los líderes musulmanes han admitido que “el Islam es usado frecuentemente por los miembros de nuestra religión para sus propios fines e intereses” y que “la violencia y el abuso afecta a la libertad de religión y el nombre mismo de la religión”. Por esto, esperan que “el espíritu del Ramadán pueda conducir a la búsqueda de las mejores maneras de construir lazos de amistad con los cristianos, fruto del amor mutuo y la compasión”. (PA) (Agencia Fides 19/7/2012)
