ASIA/SRI LANKA - Continúan los enfrentamientos, aumentan los desplazados y el sufrimiento de los civiles

martes, 23 enero 2007

Colombo (Agencia Fides) - El conflicto civil enSri Lanka está en una fase de recrudecimiento que está causando gran sufrimiento a la población civil. El ejército regular trabaja desde hace semanas en una acción para desencovar de sus bases al este del país a los guerrilleros del Liberation Tigers of Tamil Eelam, acusados de haber abierto fuego contra posiciones militares, a pesar del alto al fuego decretado en el 2002. Los llamamientos de las Naciones Unidas han sido desoídas y las hostilidades continúan sobre todo al este de la isla.
Hace algunos días, al caro precio de unas 400 vidas humanas y de miles de prófugos que han abandonado el área, el ejército del Sri Lanka conquistó, después de una batalla que ha durado semanas, la ciudad de Vakarai, a 240 km al Noreste de Colombo, fortaleza de los separatistas Tamiles. Se estima que han muerto 45 soldados cingaleses y 180 han sido heridos, mientras que han caído 331 combatientes Tamiles en los enfrentamientos. También en el hospital de Vakarai, dónde la Cruz Roja italiana estaba realizando un proyecto, se ha encontrado al centro del fuego, y ha sido evacuado por militares.
La pérdida de Vakarai, que en la tregua firmada entre gobierno y Ltte bajo el patrocinio noruego en el 2002 fue asignada a la esfera de influencia de los Tigres, ha obligado a los separatistas a desplazarse al Norte. Pero el ejército quiere continuar el avance hasta que los rebeldes separatistas no hayan sido completamente desarraigados del este y Norte de la isla.
Mientras de 20.000 evacuados han abandonado precipitadamente, con medios improvisados, Vakarai, que contaba con unos 35.000 habitantes antes de la batalla. Según los voluntarios del Jesuit Refugees Service (JRS) que operan en la zona, la falta de material escolar ha hecho difícil la frecuencia de los niños a las escuelas. El equipo de los Jesuitas también ha referido la falta de géneros alimentarios y medicinales. El P. Vinny, Director del JRS Sri Lanka, ha expresado su temor de que la falta de comida y medicinas pueda incrementar la difusión de enfermedades.
También el Obispo de Mannar, Mons. Rayappu Joseph, ha escrito una carta abierta al gobierno srilankese, poniendo en guardia por la violencia indiscriminada sobre los civiles y sobre asentamientos de pequeños pescadores y sobre familias católicas, por parte del ejército regular.
En el 2006 tres mil ceilandeses perdieron la vida en emboscadas, atentados suicidas y enfrenamientos armados. El agravamiento de los episodios de violencia ha aumentado los temores de que se agudice de la guerra civil que ha causado más de 70.000 víctimas en 20 años. (PA)(Agenzia Fides 23/1/2007 Líneas: 32 Palabras: 449)


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