VATICANO - La historia de santo Esteban nos enseña “que no hay que disociar nunca el compromiso social de la caridad del anuncio valiente de la fe”: el Papa Benedicto XVI dedica al Protomártir la catequesis en la audiencia general

jueves, 11 enero 2007

Ciudad del Vaticano (Agencia Fides) - "San Esteban es el más representativo de un grupo de siete compañeros. La tradición ve en este grupo el germen del futuro ministerio de los «diáconos», si bien hay que destacar que esta denominación no está presente en el libro de los «Hechos de los Apóstoles». La importancia de Esteban, en todo caso, queda clara por el hecho de que Lucas, en este importante libro, le dedica dos capítulos enteros". El San Padre Benedicto XVI ha dedicado su catequesis durante la audiencia general del miércoles 10 de enero a la figura del Protomártir Esteban.
Retomando la narración de Lucas lucano, el Papa ha recordado como a los Apóstoles, para reservarse "la oración y el ministerio de la Palabra como su tarea central", eligieron "a siete hombres, de buena fama, llenos de Espíritu y de sabiduría" para que se dedicaran al servicio social caritativo, y les impusieron las manos, después de rezar. "El gesto de la imposición de las manos puede tener varios significados" ha explicado al Papa. "El hecho de que se tratara de una acción importante, que había que realizar después de un discernimiento, se deduce de lo que se lee en la primera carta a Timoteo: «No te precipites en imponer a nadie las manos, no te hagas partícipe de los pecados ajenos» (5, 22). Por tanto, vemos que el gesto de la imposición de las manos se desarrolla en la línea de un signo sacramental. En el caso de Esteban y sus compañeros se trata ciertamente de la transmisión oficial, por parte de los apóstoles, de un encargo y al mismo tiempo de la imploración de una gracia para ejercerlo”.
"Lo más importante - ha continuado el Santo Padre - es que, además de los servicios caritativos, Esteban desempeña también una tarea de evangelización entre sus compatriotas, los así llamados ‘helenistas’... Lucas insiste en el hecho de que él, ‘lleno de gracia y de poder’ (Hch. 6, 8), presenta en el nombre de Jesús una nueva interpretación de Moisés y de la misma Ley de Dios, relee el Antiguo Testamento a la luz del anuncio de la muerte y de la resurrección de Jesús. Esta relectura del Antiguo Testamento, relectura cristológica, provoca las reacciones de los judíos que interpretan sus palabras como una blasfemia. Por este motivo, es condenado a la lapidación"
El Santo Padre ha continuado explicando que la historia de San Esteban nos enseña “que no hay que disociar nunca el compromiso social de la caridad del anuncio valiente de la fe”. El primer mártir "con la caridad, anuncia a Cristo crucificado, hasta el punto de aceptar incluso el martirio”. Por lo demás "la Cruz ocupa siempre un lugar central en la vida de la Iglesia y también en nuestra vida personal" ha subrayado el Papa Benedicto XVI. " En la historia de la Iglesia no faltará nunca la pasión, la persecución. Y precisamente la persecución se convierte, según la famosa fase de Tertuliano, fuente de misión para los nuevos cristianos”.
Por último, el Papa ha concluido su catequesis con esta exhortación: "También en nuestra vida la cruz, que no faltará nunca, se convierte en bendición. Y aceptando la cruz, sabiendo que se convierte y es bendición, aprendemos la alegría del cristiano, incluso en momentos de dificultad. El valor del testimonio es insustituible, pues el Evangelio lleva hacia él y de él se alimenta la Iglesia. San Esteban nos enseña a aprender estas lecciones, nos enseña a amar la Cruz, pues es el camino por el que Cristo se hace siempre presente de nuevo entre nosotros". (S.L) (Agencia Fides 11/1/2006 - Líneas: 42 Palabras: 636)


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