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Dakar (Agencia Fides) – Concluyó ayer domingo, 12 de octubre, en Dakar (Senegal), la Asamblea Plenaria del Simposio de las Conferencias Episcopales de África y Madagascar en la que han participado 150 Obispos y delegados de las Conferencias Episcopales del continente. Su Em. el Cardenal Crescencio Sepe, Prefecto de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos, tuvo el discurso de clausura. “Me encuentro con gran alegría entre vosotros y con vosotros, aquí en Dakar” dijo el Cardenal, “Antes de nada quisiera transmitiros un saludo afectuoso y la bendición paterna de Su Santidad el Papa Juan Pablo II”. El Prefecto de la Congregación para la Evangelización de los pueblos señaló la atención con que el Dicasterio Vaticano sigue la obra dela Iglesia en África. “Quiero expresar la profunda comunión espiritual de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos en la común misión evangelizadora: “Pido constantemente por vosotros y por todas las comunidades que han sido confiadas a vuestra solicitud pastoral”.
En el plano de las indicaciones pastorales el Cardenal Sepe afirmó que “la misión evangelizadora sigue siendo la preocupación mayor de la Iglesia universal” y esto presupone en África la consolidación de la iglesia-familia. “La Iglesia en África esta llamada a construirse sobre los cristianos adultos y maduros, sobre los testigos auténticos. Y estos testigos auténticos son tanto los Obispos como los Sacerdotes, los Religiosas y Religiosas y los Laicos”. A este respecto, el Cardenal Sepe recordó las conclusiones de Sínodo Ecclesia in África: “la Iglesia en África para ser evangelizadora debe comenzar por evangelizarse a si misma”. El objetivo no es fácil pero se deben hacer todos los esfuerzos posibles porque “hay tantos hermanos y hermanas que tienen el derecho de conocer a Jesucristo ; y nosotros tenemos el derecho de anunciarlo”. El prefecto de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos recordó los desafíos que debe afrontar la Iglesia en África: desde la difusión de las sectas hasta el extremismo y las dificultades de orden financiero. “Pero con respecto a estos problemas” prosiguió el Cardenal “la Iglesia en Africa no puede replegarse sobre si misma. Debe abrirse a la dimensión de catolicidad y de la universalidad de la Iglesia. Esta llamada pues a evangelizar incluso fuera del Continente. Y debo decir que hasta el momento la repuesta ha sido muy positiva”.
El Cardenal concluyó pidiendo a los miembros del SECAM/SCEAM que “sería oportuno organizar con la colaboración de nuestra Congregación, un Congreso Misionero Panafricano”. (L.M.) (Agencia Fides 13/10/2003 Líneas: 34 Palabras: 434)
