VATICANO - El Papa Benedicto XVI celebra la Dedicación de una nueva iglesia: "Sobre todo en nuestro contexto social tan secularizado, la parroquia es un faro que irradia la luz de la fe y sale así al encuentro de los deseos más profundos y verdaderos del corazón del hombre"

Ciudad del Vaticano (Agencia Fides) - "La solemne liturgia de la dedicación de una iglesia es un momento de intensa y común alegría espiritual para todo el pueblo de Dios que vive en el territorio: a esta vuestra alegría me uno de todo corazón.... Sobre todo en nuestro contexto social tan secularizado, la parroquia es un faro que irradia la luz de la fe y sale así al encuentro de los deseos más profundos y verdaderos del corazón del hombre, dando sentido y esperanza a la vida de las personas y de las familias". El Domingo 10 de diciembre el Santo Padre Benedicto XVI ha ido en visita pastoral a la Parroquia de Santa Maria Estrella de la evangelización en Torrino (Norte), en el sector Sur de la Diócesis de Roma, para la Celebración de la Santa Misa y la Dedicación de la nueva iglesia, la primera Dedicación de su Pontificado.
En la Diócesis de Roma el tiempo litúrgico de Adviento está dedicado desde hace dieciséis años a la sensibilización y recogida de fondos para la realización de las nuevas iglesias en las periferias de la ciudad, el Santo Padre ha pedido por ello "a todos los fieles y ciudadanos de buena voluntad que continúen en este compromiso con generosidad, para que los barrios que carecen todavía de ella puedan tener lo antes posible sede de su parroquia". Dirigiéndose en particular a los fieles de la nueva parroquia, joven porque es de reciente fundación y porque la gran mayoría de las familias son jóvenes, el Papa ha dicho: "A vuestra comunidad, por tanto, compete la ardua y fascinadora tarea de educar a sus hijos a la vida y a la alegría de la fe."
El Papa Benedicto XVI ha comentado después las lecturas proclamadas poco antes durante la Misa: "las tres lecturas de esta liturgia solemne quieren enseñarnos bajo aspectos muy diferentes el sentido de un edificio sagrado como casa de Dios y como casa de los hombres. Nos encontramos con tres grandes temas, en estas tres lecturas que hemos oído: la Palabra de Dios que reúne a los hombres, en la primera lectura; la ciudad de Dios que, aparece al mismo tiempo, como esposa, en la segunda y por último, la confesión de Jesucristo como Hijo de Dios encarnado, expresada en primer lugar por Pedro, que pone así principio a esa Iglesia viva que se manifiesta en el edificio material de cada iglesia".
Al término de la homilía el Santo Padre ha recordado como "en la hora decisiva de la historia humana, Maria se ofreció a Dios, su cuerpo y alma…De este modo Maria nos dice qué es el Adviento: salir al encuentro del Señor que viene a nuestro encuentro. Esperarlo, escucharlo, mirarlo. Maria nos dice, para que existen los edificios de las iglesias: existen para que dentro de nosotros se haga espacio a la Palabra de Dios; porque dentro de nosotros y a través de nosotros la Palabra pueda también hoy hacerse carne". (S.L) (Agencia Fides 11/12/2006, Líneas: 35 Palabras: 543)